11 abril 2006

USA Y COSTA RICA: EJEMPLOS DE REÑIDAS DEFINICIONES ELCTORALES

No es la primera vez que en recientes elecciones democráticas en nuestro continente se han producido reñidas definiciones entre candidaturas que disputaron palmo a palmo los votos. Sin ir muy lejos, Estados Unidos y Costa Rica también han vivido elecciones de infarto. En ambas naciones, el resultado final tuvo en vilo, por bastante tiempo, a los candidatos debido a la estrechez en la diferencia de los votos.

La elección en Costa Rica, en febrero pasado, fue muy compleja y sorpresiva porque los estudios previos daban 15% más a favor del ex Premio Nobel de la Paz Óscar Arias, pero, al final, peleó voto a voto con su rival Ottón Solís. Cuando se escrutó el 90% de los votos, el primero tenía 40.5% frente al 40.2% del segundo. Después de un conteo manual, que se prolongó por 14 días, Arias ganó con una estrecha ventaja. En los comicios presidenciales del 5 de febrero se computaron 1.623.992 votos válidos, de los cuales Arias, del Partido Liberación Nacional (PLN, socialdemócrata) obtuvo 664.551 (40,92 por ciento) y Ottón Solís, del Partido Acción Ciudadana (PAC, centro), 646.382 (39,80 por ciento) para una diferencia de apenas 18.169 sufragios

En EE.UU, en el año 2000, el republicano George W. Bush logró el triunfo frente al demócrata Al Gore, en una reñida elección en la que se disputaron los votos del estado de Florida. Como el sistema norteamericano tiene sistema indirecto de elección a través de colegios electorales, que representam a cada uno de los estados proporcionalmente representados, y luego de una reñida competencia en la que Bush y Gore habían ganado casi igual número de colegio electorales y ante la definición final que correspondía a Florida, luego de un amplio proceso de impugnación, que tuvo que ser dirimido por la Corte Suprema, Bush ganó por apenas 537 votos en dihco estado. Lo curioso es que el sistema había hecho perder a Gore, aunque en número de votos a nivel nacional había ganado por un margen de aproximadamente 300 mil votos

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vos decís que hay cierto paralelismo entre la elección gringa y la tica... De primera entrada se podría pensar que así es.

Sin embargo la en la elección tica hubo muchos factores que estuvieron de fondo. Si bien es cierto que ambos casos el resultado fue reñido y en algún momento se habló de hasta fraude (en Costa Rica aún se habla un poquito, aunque como siempre pasa con este pueblo: cuatro días después ya todo se olvidó)
Una de las grandes diferencias que marcó la elección en Costa Rica fue que el señor premio nobel de la paz Oscar Arias Sánchez, a parte de ser un corrupto, fue elegido presidente de forma inconstitucional (la constitución costarricense no permite la reelección ya él fue presidente, en el periodo 1986-90)y que una institución del poder judicial (si no me equivoco) le dio este permiso, brincándose una disposición en contra de la Asamblea Legislativa (Congreso).

Además este señor apoya la firma del TLC con los gringos, cosa que una buena parte de la población no lo desea -y está en aumento-, por una cuestión de soberanía y de humanidad.

Otro punto: don Oscar Arias Sánchez representa a uno de las dos oligarquías políticas tradicionales que desde la última guerra civil del país (1948) se han venido peleando el control nominal del gobierno. Esto porque desde los noventas ambas agrupaciones "Pactaron" para no molestarse ningún proyecto que les interesara.

Ottón Solís en cambio, se muestra en contra del TLC (y mucha de la gente que no lo desea votó para presidente por él, pero para diputado votó por otro partido), además por su discurso, representa la renovación de la política de Costa Rica al prometer una mano firme con la corrupción y el despilfarro de dinero (algo en lo que su partido ha sido bastante consecuente), proviene del mismo partido que el señor nobel, pero hizo una agrupación aparte, su propio partido.

Al menos ofrecía un "aire fresco" a la deslegitimada democracia costarricense.

Como se ve, la elección gringa y la elección tica, no tuvieron tantos paralelos.

PD: como ya habrán adivinado, soy tico.