19 noviembre 2006

ELECCION EN LORETO

LECCIONES DE LA ELECCION (A BOCA DE URNA)

1.- El triunfo de Iván Vásquez en la elección regional simplemente ha sido una constatación de las estadísticas previas que demostraban un amplio margen de ventaja que le sacaba a sus competidores. Los casi 20 puntos que lo separan del pastor Alfredo Yong Quina se mantuvieron de forma importante de modo casi sostenido durante los meses que duró la campaña. Lo más probable es que a partir de ahora, conociendo la vocación ególatra y autoritaria de Iván Vásquez, es que se puede convertir a Loreto en un feudo de Fuerza Loretana (por lo que la oposición democrática debe estar advertida y los fiscalizadores no caer en los cantos de sirena del ivanismo)

2.- El poder de arrastre de Fuerza Loretana se ha mostrado en todo su esplendor. El voto regional ha permitido levantar de forma tan fuerte lo que habíamos previsto en cuanto a sus candidatos distritales, lo cual posibilita que muchos de los votos entregados a Jorge Monasí, Juanito Cardama, Roy Meza y Lucio Güibin, quienes eran personajes muy menores y cuyos porcentajes son muy superiores a la calidad de sus personas. El voto de arrastre siempre ha sido muy fuerte en Loreto y en esta oportunidad, aunque en menor medida, Iván Vásquez ha contribuido a hacer crecer a sus protegidos.

3.- Resulta divertido que el peor alcalde de la ciudad de Iquitos esté disputando el segundo lugar en la reelección (en Maynas) y sea el que mejores perspectivas de triunfo haya tenido dentro de las autoridades que tentaban a repetir el plato. Para nadie es un secreto que Jorge Monasí compró un lugar como candidato dentro de FL por un monto bastante considerable y aún cuando su gestión en el distrito de San Juan deja mucho que desear en todos los aspectos, reitera también que al pueblo a veces es muy fácil hacerle pasar gato por liebre. Un cadáver político que ha devuelto a la vida la plata (y el carisma de Iván Vásquez).

4.- Aunque los resultados son menos holgados que en la región, en Maynas se ha consagrado el triunfo de Salomón Abensur sobre la base de ser menos mala opción que las restantes que se disputaban en la última semana la alcaldía. Entre la fuerza del dinero de Monasí y el estilo de gobierno chambón y desordenado que planeaba ejecutar Charles Zevallos, Abensur se erigió en la sensatez. Sin brillo, con un marcado carácter débil y con muchas dudas por el futuro, sin embargo hay algo que no se le puede negar a Shaluco, y es carisma y capacidad para generar consensos, al punto que gran parte de los ciudadanos que en algún momento pensaban votar por el APRA y luego del grave cisma ocurrido luego del mitin de cierre de campaña del lunes finalmente optaron por VALOR, entre muchos otros presuntos votantes de otras agrupaciones. Esperamos que su gobierno sea fuerte y transparente, libre de ataduras y compromisos con los mismos grupos de siempre.

5.- El pastor Alfredo Yong Quina ha crecido de modo tan fuerte, al punto que sus resultados lo colocan entre el 20% y el 25% de las preferencias electorales a nivel regional. Aquellos números son mayores que el 11% que obtuvo Restauración Nacional en las elecciones presidenciales del 9 de abril. Incluso ha generado un voto de arrastre para candidatos como Elisbán Ochoa y Yoli Vigil. Ya lo hemos dicho y reafirmamos lo mismo: Yong Quina se ha convertido en una alternativa que se tendrá que confrontar con el futuro y con la capacidad que tenga para desmarcarse de su evidente entraña sectaria de ser un candidato con un fuerte contenido religioso en su discurso. Yong Quina debe limpiarse de ese espectro o al menos tratar de suavizarlo para permitir una mayor apertura. Al menos es uno de aquellos políticos que tendrá una gran responsabilidad y debe estar a la altura del reto.

6.- Charles Zevallos es una sorpresa que ha ido creciendo en el último tramo de la campaña. Y ahora su presencia ha crecido y en cierto modo lo ha reivindicado como un candidato muy popular entre el electorado. Muchos, con evidente patería para con el candidato ganador y con el candidato del presidente regional electo, han tratado de minimizar el hecho que Zevallos haya quedado en segundo lugar a 5 puntos de quien hace un mes nada más tenía 20 puntos de ventaja no es para ningunear. Y Zevallos, estridente, absurdo, simplón y con graves problemas administrativos y legales, sin embargo acaba de sintonizar con un sector del pueblo con propuestas a veces demagógicas pero muy efectistas. Sintonizó en cierto modo con un sector que en algún momento votó por Humala y siempre será un fuerte espectro crítico del sistema que de algún modo encarnarán Vásquez y Abensur a partir del 2007.

7.- Se ha confirmado el descalabro de los candidatos reeleccionistas. En el caso de Juan Carlos del Águila era quien parecía como el de mejores opciones de reelección, pero terminó siendo el peor situado, con un porcentaje ínfimo. Una campaña que en algún momento pudo ser mejor encaminada tenía no obstante como pasivos el desgaste que implica una reelección (nadie ha reelecto un alcalde en Iquitos), un entorno que Del Águila no supo distinguir, los enfrentamientos constantes con la prensa y errores finales de campaña, entre ellos la colocación de la casa de la Plaza 28 y, claro está, la grave acusación del cisma ocurrido dramáticamente en el mitin de cierre de campaña con el candidato regional Jorge Pérez Santillán, que al final le restó a Del Águila unos 5 a 8 puntos de ventaja. Deplorable, aunque antelado final. Y triste balance del APRA en la región.

8.- En el caso de Robinson Rivadeneyra, era menos probable su reelección, además su campaña fue bastante austera, sin embargo, ha logrado obtener el tercer puesto con un porcentaje cercano al 10%, lo cual es un fracaso para una autoridad pero tampoco es tan pésimo como se esperaba del actual presidente regional. Lo que sí es muy cierto es que suele convertirse en una lección para una gestión que no supo nunca encontrar un rumbo más allá de las promesas. Esta es una realidad que no podemos evitar y menos dejar de sentir. Lo mismo podría decirse de Raúl Chuquipiondo, candidato de ida y vuelta que no llegó nunca a funcionar como en el 2002. La suerte de UNIPOL está echada.

9.- Finalmente, en cuanto al tema de los reeleccionistas, mejor dignidad tuvo Carlos Lozano, que se fue mucho antes de ayer, cuando vio que las cosas estaban decididas en su contra, algo que no todos tuvieron la claridad y humildad para entender.

Pd: Para más información sobre la elección en Loreto, lea el diario
Pro&Contra

29 agosto 2006

EL HUMOR INVOLUNTARIO DE LOS POLITICOS

Los políticos suelen ser tan cómicos. Demasiado. Sólo que ellos aún no terminan de darse cuenta de su aptitud para el histrionismo de café teatro. A su desternillante comicidad ellos lo nombran como aplomo. A sus radiantes compases de delirio lo confunden con personalidad. Y a su parlamento de chistes colorados lo autodenominan, con grave majestad, “plan de gobierno”.

Son unos locos los políticos. Divertidísimos. Nos sonríen por demás, hasta cuando no se lo pedimos. Uno de aquellos que me detesta con poco disimulo me brindó hace unos días una pelada de dientes fabulosa que poco faltó para que me colocará al borde del shock nervioso ¿Eras tú o era el fantasma de tú, Pelachín? En este caso la risa no se torna llanto, sino náuseas, pero igual, el poder es el poder, parafraseando al filósofo involuntario “Puma” Carranza.

Porque hay una vastedad de demostraciones de humor involuntario que ya han empezado a proliferar en nuestro medio y que falta poco para que los contraten como guionistas estrellas de Reca(r)gados de Risa. Vale la pena soñar con este ramillete de despropósitos:

- Cuando un candidato que quiere reelegirse con total concha y pana y señala, muy a pesar de su 4% y sus amigos asalariados que lo secundan, que su gobierno ha sido el mejor de la historia de Loreto, creyéndose el Supremo de Augusto Roa Bastos, incurre en humor de tipo delirante-esquizoide-maniaco depresivo-alangarcíesco.

- Cuando un candidato considera que hay que ser conchudo para reelegirse pero no se acuerda de sus hermosas irregularidades de épocas antaño diferentes, pero al mismo tiempo sombrías, se decanta por el humor de tipo amnésico-cuando-le-conviene.

- Cuando un candidato invoca la extinción de un proceso penal de irregularidades por importación de productos y luego mira al cielo e invoca a los poderes divinos, en realidad se está curando en salud y afirma ser depositario de un humor prescriptivo, más comúnmente conocido como el humor gracias-señora-ley (por ciega, manca y coja)

- Cuando un candidato indica que la mafia del jurado le ha birlado la posibilidad de competir y se encrespa como gallito de pelea con aquellos que sólo se han encargado de señalarle el desastroso proceso de inscripción que perpetró, los clamorosos fallos de tipo formal (impensables en una organización como la suya y en un personaje que ha pisado colegio, universidad y Congreso juntos) y la capacidad casi oligofrénica de sus personeros para arruinar una opción electoral, entonces nos encontramos ante un error de tipo yo-no-fui-señor-juez (fueron los mongoloides de mis partidarios)

- Cuando un candidato vuelve a la palestra como el amanecer de los zombies, o como cuando las calaveras salen de su tumba – chunga la cachunga la cahgunga lá – y se aferra a un gruñido de otoronguito y se cierra en torno a un canal de televisión y de una radio que son suyas, expiden noticias sólo suyas y alaban y loan a candidatos que son sólo suyos, entonces estamos ante un humor a-mí-qué-chu (aunque, en honor a la verdad, en este rubro hay más de un competidor de cuidado).

- Cuando un candidato sale de la cárcel luego de purgar penas por actos de corrupcción y se lanza nuevamente al poder, y para ello lo celebra con una fiestota total donde se juegan hasta los calzoncillos, además con grandes posibilidades de ganar, estamos ante un humor de tipo Macondo (sucede así, aunque usted no lo crea).

- Cuando un candidato manda a trabajar a sus proveedores y futuros concesionarios la contracampaña más asquerosa e inmunda que se avecina, jugando al innoble y siempre aberrante recurso del chantaje, la intimidación y la mierda esparcida con ventilador, su humor ya no es tan gracioso ni involuntario, sino de tipo perverso, psicopatológico, sólo apto para psiquiatras y mafiosos.

- Cuando un candidato cree que representa al pueblo y sólo se representa a sí mismo, a sus familiares, alguno de sus vecinos y un par de sus patas financistas y otro tanto de sus patas ayayeros, estamos ingresando claramente en el terreno del humor yo-también-quiero-mi-mamadera (¡sí, señor!)

Hay muchos más tipos de humor involuntario que representan a muchos más candidatos, los cuales irán apareciendo en el transcurso del tiempo y de la diversión. En todo caso, a juzgar por las encuestas es más bien el pueblo quien se constituye como humorista constante, ferviente y casi eterno. ¡Viva la democracia! ¡Viva la diversión! ¡Abajo el sentido común! (pero con ganas…)

20 agosto 2006

2010 (Los costos futuristas de una pésima apuesta política)


Alrededor de una larga mesa de cedro barnizado del salón de conferencias de la Quinta Región Militar, el Comité para la Paz y el Desarrollo decidió asumir el costo político de los acontecimientos. Cada uno de portaba sobre sus carpetas, en organizadores naranjas y con el sello rojo de CLASIFICADO asomando a través de aquél pedazo de cartón labrado con manía burocrática, los reportes de las actividades de una célula subversiva que había adquirido protagonismo extremo en el último mes. Había una extraña sensación de pesadumbre que había hecho presa de los estrategas del Sistema.

El Alcalde miró el objeto resplandeciente que tenía frente a él. Canoso, de nariz aguileña y mirada cansina, se sacó por un breve instante los anteojos bifocales de marco dorado y hurgó cada uno de los movimientos del batallón de soldados que colocaban las vallas necesarias para armar la mole de acero que resguardara el Palacio Edil de los ataques sorpresivos. Aún esperaba noticias del Comando Conjunto. Las primeras señales de la noche se escucharon a través de lentas, broncas y graves campanadas emitidas por la Iglesia Matriz. Alrededor, un grupo de francotiradores, rodeaban la sede del Vicariato de San León del Amazonas. Levemente se persignó y dio una plegaria por la salud de Monseñor Gómez de la Torre.

Encendió la televisión. Vio la última emisión de El Iquitense con la presunta huelga de las prostitutas llevándose a cabo en las afueras del Concejo Edil. Aunque no le hubiera gustado pasar una noticia que desde todo punto de vista le parecía inmoral, supo que debía ser mostrado, expresado, demencialmente publicitado para ir generando psicosociales, tal como le había sugerido el Senador Pinasco. Debía darse la idea de que el caos en realidad era tan sólo un desorden humorístico, propio de las celebraciones del nuevo tiempo que llegaba al mundo.

La Ordenanza, aprobada por unanimidad en la última sesión de Concejo Edil, con el apoyo de todos los regidores y la redacción del “Gancho” Fernández, asesor principal, no admitía dudas. Era necesaria la incautación de todo material que pudiera considerarse subversivo, la detención discrecional de todo aquel que se considerara sospechoso. Además, un toque de queda, en coordinación con la Prefectura, el gobierno central y las Fuerzas Armadas de las nueve de la noche a las cinco de la mañana. Los medios de comunicación debían aprobar un código de revisión de su material informativo a fin de no crear pánico y desmoralizar a las fuerzas armadas con noticias tendenciosas. Estas disposiciones enojosas podían ser consideradas “duras”, pero eran vitales en su cruzada impenitente contra la inmoralidad y la pérdida de tiempo, no tenían, sin embargo, parangón con el paquete de acciones inmediatas que se había puesto en marcha, con el fin de salvaguardar el Estatuto de Paz Espiritual:

1.- Se proscribió absolutamente el acceso desde cabinas públicas de internet a conversaciones interactivas, acceso a páginas de contenido pornográfico y/o violento, letras de canciones “potencialmente tendencioso”, o aquellas cuyo origen sea dudoso en cuanto a geografía, financiamiento y credo.

2.- Se prohibió el chat y el Messenger. Todos los servicios de conexión que trabajaban en la ciudad debían obligatoriamente venderle parches de negación de acceso a los consumidores. Quienes se negaban a comprarlo y tuvieran una verificación negativa debían ser multados inmediatamente por el área tributaria de Concejo Edil.

3.- Se prohibieron los conciertos de música estridente, los espectáculos no autorizados y los bailes de moda, salvo en locales permitidos (los cuales empezaban a las nueve de la noche y terminaban a la una de la mañana, sólo días viernes y sábado).

4.- Los bares no atenderían más allá de la una de la mañana y sólo podían vender licor a mayores de veintiún años.

5.- Se cerrarían dos cuadras a la redonda en todas las iglesias de IQT durante las horas de misa. En días de procesión, el cierre sería total una hora antes y una hora después.

6.- Se conminaba al silencio. Los motocarristas tenían orden de internamiento de sus vehículos si excedían el mínimo de ruido permitido, que eran sesenta decibeles. Estaban prohibidos los juegos recreativos en las calles y aceras de la ciudad.

7.- Se proscribía cualquier tipo de prostitución callejera y se aplicarían reglas severas para la administración y atención de centros de diversión y establecimientos nocturnos. Después de una exhaustiva verificación, sólo quedaron vivos a las condiciones de seguridad un par de discotecas, - entre ellas el Noa -, un local bailable y un night club.

8.- Se prohibió el funcionamiento de locales “de ambiente”, donde se realizaban actos impúdicos o contrarios a la naturaleza humana, al orden y las buenas costumbres.

9.- El más famoso burdel de la ciudad, Teletroca, fue desterrado fuera del casco urbano. No podía colocarse un prostíbulo o casa de citas sino a partir de los límites del kilómetro quince de la carretera hacia Nauta, y a partir del kilómetro veinte de la carretera hacia Yurimaguas.

10.- Debían ser canceladas las fiestas y celebraciones en las calles, los bailes en Complejos, así como la inmediata proscripción de algunas orquestas de música.

Sabía que estas medidas iban a generar resistencias. Sin embargo, las elecciones municipales serían dentro de dos años y su partido no tenía problemas. Enarbolaba su legitimidad, su afán por construir una Sociedad Moral y Espiritual, como prometió en campaña. Este era el momento de aplicar ese plan, votado masivamente por los ciudadanos. Y era la necesidad de sentir un verdadero cambio, desde las entrañas mismas de la condición humana, la que coronaría con palmarés su audaz apuesta.

La radio de frecuencia amplia indicó que era sólo cuestión de una media hora para que la bandera enemiga ondeara sobre el nervio financiero y comercial de la ciudad. Marcó inmediatamente el número que había sido asignado en caso de emergencias. Era una cuestión de vida o muerte. Del otro lado, de la línea, la voz ríspida, grave y levemente seseante, le contestó. Era el fin de la sociedad prometida en las elecciones del 2006.

13 agosto 2006

Tiempo de concesión (y viajes)

El último fin de semana, mientras despedíamos a nuestro colega Rafo León, conductor del exitoso programa de cable, “Tiempo de Viaje”, buscamos un lugar dentro del aeropuerto internacional Francisco Secada Vignetta para invitarle algún café. Nuestros esfuerzos fueron infructuosos, porque no se daba una atención decente en los interiores. Tuvimos que salir a la chinganita simpática que existe fuera, sentarnos sobre unos tablones mal cortados y beber a pico la botella de bebidas y comer rosquitas y queique de cincuenta céntimos.

Al regresar, quisimos ingresar a lavarnos las manos en algunos de los servicios higiénicos. No había agua (no suele haber agua nunca en dicho lugar). Hacer cola para entrar a sala de espera por una puertita pequeñita, donde no hay un control efectivo, retrasa considerablemente a los pasajeros. Rafo León es un tipo chévere y acostumbrado a lidiar con las condiciones más incómodas. Pero varios de los turistas que llegan desde el extranjero no lo consideran así y, por ende, el desprestigio o la mala imagen de la ciudad empiezan desde el momento mismo de bajar del avión.

Y, claro, al bajar del avión, no sientes en todo caso que el corazón te late más fuerte, como en la canción-estereotipo de Raúl Vásquez, sino lo que descubres es que un corazón fucsia de metal se cierne sobre tu cabeza apenas traspones la puerta de equipaje, anunciando la publicidad de un night club local. Surrealista, sin duda alguna.

El próximo viernes 18, el gobierno central pondrá en oferta la concesión por 25 años de un puñado de terminales aéreos a nivel nacional, entre ellos el de Iquitos. Existen dos postores interesados: los consorcios Aeropuertos Unidos del Perú, colombiano; y GHB-Swissport, suizo. Se prevé, además, que por el paquete se pague aproximadamente el mismo monto que en su oportunidad fue desembolsado por el aeropuerto internacional Jorge Chávez de Lima como compromiso de inversión (120 millones de dólares).

En términos generales, ésta resulta una noticia bastante alentadora para las inversiones en nuestra pauperizada región. Si nos atenemos a las condiciones en que se encuentra el aeropuerto Secada Vignetta, resulta casi una situación de necesidad extrema que no admite críticas, menos aquéllas en las que el cálculo político y la ignorancia técnica se amalgaman como en un cóctel molotov. Nuestro aeropuerto, cuya categoría de “internacional” suena a pura ironía en sus actuales condiciones, se ha desprestigiado y deteriorado tanto en los últimos tiempos, en un acto de desidia e ineptitud que debe ser afrontada por quienes tienen a su cargo su administración y control. Ante ello, bien merece una oportunidad, pero es necesario afinar estas estrategias de modo inmediato a fin de captar los principales interesados.

Iquitos ha sido una plaza turística atractiva para el tráfico aéreo, con destinos que desde acá y para acá se hacían a Brasil, Colombia o los Estados Unidos. No hablo de hace mucho tiempo atrás. Quién no recuerda a la compañía brasilera Varig en sus vuelos de conexión o el famoso avión “mayamino” de Faucett que los sábados llegaba en la noche repleto de turistas y comerciantes. Además, también se realizaban las conexiones directas que se hacían a ciudades del interior como Cusco, Chiclayo o Trujillo, las cuales desaparecieron aparatosamente, del mismo modo como despareció el elegante restaurant del segundo piso, donde se podía comer platos de categoría a precios no tan elevados, además de observar la llegada de los aviones desde la terraza, situación que no he podido repetir, aún no se sabe a costa de qué motivo esgrimido por los mediocres mandamases del aeropuerto.

Nadie en su sano juicio debería estar en contra de la inversión privada, sobre todo cuando esta importante inyección de capitales a favor de nuestra región plantea expectativas de cambio social en la población. Evidentemente, debemos ser desapasionados, sobre todo pragmáticos, en ambos lados, tanto en los que se muestran a favor como los que se muestran contrarios. Premisa básica de esto es no jugar con la ignorancia ni repetir argumentos ignorantes para oponerse, como el equiparar una privatización con una concesión, pues mientras en el primer caso, cuando se privatiza se hace transferencia de una empresa o actividad pública al sector privado, la concesión es el negocio jurídico por el cual se cede facultades de uso privativo de una pertenencia o la gestión de un servicio público en plazo determinado bajo ciertas condiciones.

Tampoco creer que la concesión es por sí misma la panacea de la solución de los problemas, pues en ellos también interactúan actores políticos (como en el caso de los gallinazos y la restricción de vuelos diurnos) o propiamente empresariales (como las propias compañías aéreas y sus paquetes promocionales). Los eventuales costos por los servicios se encarecerían, o al menos recuperarían sus precios reales y eso también lo saben los agentes turísticos, quienes creen que es un precio que se debe pagar en aras de obtener un mejor servicio, el cual sin embargo nunca podrá ser excesivo ni explotador con el usuario local (allí tendrán que tallar bastante los organismos supervisores y fiscalizadores tanto públicos como privados).

Lo verdaderamente revolucionario de este proceso y en lo que no hay marcha atrás es en la necesidad de que los privados realicen una gestión eficiente y productiva en nuestros aeropuertos. Aquí se encuentra la principal victoria ideológica de la sensatez: el APRA reconoce que no todo lo privado es sospechoso, como siguen creyendo los retrógrados. Sabe que no puede repetir la infausta experiencia de los ochenta, con el desorden de Aeroperú y CORPAC. Ha decidido, además, apostar por el turismo y la integración y un primer paso fue la exoneración de IGV a los pasajes aéreos a esta zona. Ojala siga por la buena senda con la concesión del Francisco Secada. Quienes tienen realmente la visión de lo que Loreto debe explotar con mayor fuerza y éxito en su favor saben que esta medida es y será siempre, en mayor o menor medida, una apuesta ganadora.

06 agosto 2006

ABRIL ROJO EN AGOSTO

Resulta una gran noticia la llegada de Santiago Roncagliolo, en un nuevo esfuerzo conjunto de Tierra Nueva y este diario que engalana la anémica actividad cultural de nuestra ciudad. Y más aún si tenemos en cuenta que Roncagliolo presentará su última novela Abril Rojo, reciente Premio Alfaguara, el más importante galardón literario de habla hispana.

Lo divertido e interesante de la nueva visita del consagrado es que ésta resulta su deuda pendiente con una ciudad que anteriormente lo había observado como joven promesa que se fue a España para publicar El Príncipe de los Caimanes y hace no mucho – dos años aproximadamente – como talento FNAC, autor de Pudor. No hay duda que quienes más hemos aplaudido el veredicto de Alfaguara nos encontramos en la gente de Tierra Nueva, a quien Santiago nos honró con su presencia en la Primera Semana del Libro del 2004.

Schelling decía que lo siniestro es algo que debiendo permanecer oculto se ha revelado. Abril Rojo en ese sentido es una novela siniestra. Porque discurre el velo de una guerra interna, que desgarra al país en general, pero con mayor crueldad y virulencia a aquellos que se retratan a sí mismos como víctimas. En el Perú de Sendero Luminoso y bajo el recuerdo ominoso de Ucchuraccay, Y ésta es una guerra simbólica (en la onda del reciente Guerra bajo la luz de la velas, escrita por el talentoso Daniel Alarcón) en que las heridas físicas se diluyen rápidamente y adquieren naturaleza casi anecdótica en medio de aquellas que laceran profundamente el alma de los personajes.

El fiscal Félix Chacaltana, representante de la ley y el orden en medio de la espesa maraña del aislamiento, es un retrato vivo de las inclemencias de la realidad abofeteadas en el rostro del idealista. Chacaltana es una víctima, porque es un creyente, un cruzado romántico en la sierra de Ayacucho tratando de aplicar una justicia cartesiana, formalista, burocrática que se atrofia ante los insuperables vaivenes sociales, culturales, incluso antropológicos que circundan el contexto.

Pero sobre todo, Chacaltana es un perdedor. Un perdedor porque su infructuosa búsqueda de un asesino serial que utiliza ciertos elementos ritualistas para cometer sus crímenes lo pierde entre un laberinto de nombres, situaciones, retratos que no conoce, no entiende, no descifra a cabalidad. Un perdedor porque constata no sólo los enormes abismos entre el Perú oficial y el Perú real (al fin y al cabo una derrota inherente al hecho mismo de su conocimiento), sino porque termina, en el fondo, resignándose a ellos. La vida es un monstruo que se devora su refinada burguesía seudo intelectual, sus conceptos occidentalistas y laicos, además al final se va devorando sus ideales más luminosos y sus esperanzas más robustas.

En aquella estructura pagana, animista, enfurecida, ilógica e irracional donde se desarrolla la novela, destaca, además, la locura de la sangre. El ritual de la violencia. La celebración macabra de la muerte. Y se va desatando a través del rojo intenso, a través de la psique perturbada del asesino (malhechor que lo oficial pretende asimilar a todo aquello que tenga la categoría de marginal, de extraño, de desconocido). Y se delata también, cómo no, en el majestuoso y grave espectáculo de la Semana Santa Ayacuchana, en un abril del calendario que puede hacer coincidir (quizás involuntariamente por su autor) con la celebérrima primera línea de La Tierra baldía de T.S. Eliot, y en cuya resolución estructural entraña el festín de los campos teñidos de sangre, las calles coloniales atestadas de velas, la mente de Chacaltana abarrotada de imágenes espantosas y dudas salvajes y la destreza del antihéroe sembrando el paisaje de muertos que lo mismo pudieron haber sido asesinados por terroristas, por comuneros o por ciudadanos extraviados en esta demencia caótica y no tan circunstancial.

Roncagliolo es pródigo en imágenes y situaciones que se agradecen por su pulcritud visual y su capacidad para envolver dentro de la trama. Claro, según propia confesión, nunca quiso hacer de Abril rojo una historia de tesis antropológica o sociológica ni una dramatización del informe final de la Comisión de la Verdad. Muchos creen que su pretendida eficacia narrativa (la cual alcanza grados de destreza en algunos inspirados pasajes) le crea un problema de ligereza conceptual, argumento que no puede ser más que un desconocimiento casi candoroso de las nuevas alternativas literarias para mantener el interés del lector sin perder espesor y valor de contenido.

Abril rojo es más ágil que La hora azul, de Alonso Cuento (reciente premio Herralde), pero menos densa que ésta. Con una astucia que recuerda por ratos a Lituma en los Andes de Mario Vargas Llosa, aunque también a cultores de la novela negra, sus deudas exceden lo textual y se adentran en lo audiovisual y cinematográfico, como con películas clásicas del género psicothriller como El silencio de los inocentes de Jonathan Demme y Seven de David Fincher. Vistos los resultados finales de la mezcla, con obvios y humanos errores, el combo no termina de sorprender y agradar. Uno hasta ya se imagina cómo sería la película (y aquello, escúchenlo bien estreñidos y viejitos aburridos, no es ningún demérito, muy por el contrario).

Sin ser una obra maestra, Abril Rojo es una muy buena novela, con historia y personajes cautivantes y memorables. Es una prueba de que la nueva narrativa se está haciendo en la calle, día a día, con escritores jóvenes como Santiago Roncagliolo que lo impongan en base a esfuerzo, talento y trabajo. Será toda una experiencia que Iquitos pueda tener al autor y a la obra en vivo y en directo la próxima semana. Prohibido faltar.

30 julio 2006

ENTREVISTA A DORIS MOROMISATO

DORIS MOROMISATO: DONDE LA PASIÓN DESBOCADA SE CONVIERTE EN POESÍA
Paco Bardales

Doris Moromisato es un vendaval dentro de su pequeña pero acogedora oficina de la Cámara Peruana del Libro (CPL), en el limeño distrito de Jesús María. “Tenemos treinta minutos”, me advierte antes de que inicie la entrevista especial para este medio, con una sonrisa que más parece muy de rr.pp. Todos quienes la conocen saben que su temperamento hiperactivo no descansa nunca. Hoy es uno de aquellos días. De igual manera, Doris se ha entusiasmado tanto que nos ha brindado en exceso parte de su valioso y estresante tiempo del actual contexto.

No es para menos. Quedan algunos días para la inauguración de la XI Feria Internacional del Libro de Lima (FIL), cuyo lema es, marketera y provocadoramente, “el libro está de moda”. Moromisato es directora cultura de la CPL, encargada a su vez de llevar a buen puerto el mayor evento editorial y libresco del país. Este año la FIL tiene más de 200 actividades programadas entre el 20 y 30 de julio, en el campo ferial ubicado en el centro comercial Jockey Plaza. Tiene como país invitado a la Argentina, y entre sus atracciones principales figuran la presencia de la viuda de Jorge Luis Borges, María Kodama, la caricaturista Maitena, escritores tan importantes como el mexicano Jorge Volpi, Martín Caparros, el colombiano Jorge Franco, el editor español Jorge Herralde, además de nuestros consagrados y premiados Santiago Roncagliolo, Alonso Cueto, Carlos Germán Belli y Arturo Corcuera, entre otros.

Pero nos quedaríamos cortos si apenas señaláramos su talante administrativo y organizador. Moromisato es una pieza clave de nuestra actividad intelectual, poética y cultural. Nacida en la Hacienda Chambala en 1962, hija de inmigrantes japoneses de Okinawa, ex estudiante de Derecho, ha publicado libros de poesía, cuentos y ensayos sobre inmigración japonesa al Perú. Es especialista en género, promotora de la cultura de mujeres, fervorosa y militante feminista. Uno de sus variados intereses se centra en la construcción simbólica, cultural y artística de la comunidad nikkei. Además, es una de nuestras más representativas y extraordinarias poetas, autora de libros mayores como Morada donde la luna perdió su palidez (Lima: Cuarto Lima Editores, 1988), Chambala era un camino (Lima: NoEvas Editoras, 1999) y Diario de la mujer es ponja (Lima: Ediciones Flora Tristán, 2004).

Doris ¿Cuáles han sido tus referentes literarios más importantes?
Yo creo sin ninguna duda que los principales referentes literarios que han influenciado en mí han sido las escritoras mujeres. No necesariamente las poetas, porque yo he sido más una narradora que en el camino he ido conociendo la poesía. Pero, sin embargo, sin duda, mi mayor referente han sido las mujeres. Ahora, si tú me pides nombres, te diría sin dudar a Virginia Woolf, Alejandra Pizarnik, a la brasilera Clarice Lispector, que yo señalo que es nuestra Virginia Woolf de Latinoamérica, del mismo modo como Virginia Wolf es la Clarice Lispector anglosajona. Pero no sólo me ha influenciado la literatura, también otras disciplinas artísticas tan importantes como el cine, la música o la danza.

¿De qué modo ha influenciado el cine o la música a tu obra poética?
Pues en el sentido de que mi poesía es musical, tiene una cadencia propia que es bastante melódica. Además, creo que las imágenes de los poemas tienen un sustrato muy visual, son bastante gráficos.

¿Cuáles son los grandes temas de tu literatura?
Siento que este tipo de declaraciones no son relevantes en literatura. Hasta parecen muy de escolares. Uno no puede trivializar su propia obra indicando un tipo de diferenciación tan básica. Uno no escribe por temas concretos, sino sobre la base de momentos, necesidades, sensaciones…

…Pero es cierto que hay temas que aparecen con mayor profusión o tienen más valor dentro de tus textos, entre ellos el amor, la tierra, la afirmación de los orígenes o el género ¿Cuál de ellos es más importante para ti?
Pues, es muy difícil responderte esa pregunta. Quizás si me hubieran hecho la misma pregunta hace veinte años, lo hubiera respondido sin dudar. Pero ahora no podría hacerlo.

Tu poesía siempre ha estado vinculada con el tema del cuerpo y el de la naturaleza ¿por qué crees que es indesligable de tu propio discurso?
Yo siento que escribir sobre el agua, el río o los seres que pueblan la tierra es un tema que tiene que ver con mi propia concepción sobre el equilibrio de la naturaleza. En ese sentido, el cuerpo es parte de la naturaleza y asumirlo como tal también es una búsqueda del equilibrio que aludimos.

¿Crees que aún existe una discriminación de género en la literatura peruana?
Sí, es una discriminación que también se repite en diversos modos en la sociedad. En el caso de la literatura, es una suerte de menosprecio, de calificación en torno al género, como si fuera al peso, o quizás un sesgo muy claro a aquellas escritoras que no siguen la tradición, que no siguen el canon, que suele ser siempre impuesto por los hombres.

…Una suerte de “racismo de género”, como aludía un manifiesto de escritoras contra este tipo de actitudes, publicado el 2005, que tú también firmaste…
Exacto. Y tú sabes que en el Perú hay mejores poetas mujeres que narradoras. La poesía escrita por mujeres en el Perú es extraordinaria.

¿Por qué crees que hay un mayor desarrollo de la poesía que la narrativa femenina?
Pues yo siento que necesariamente la narrativa es un trabajo de largo aliento, de una labor metódica y de un espacio en los cuales la escritora sienta el desarrollo de una obra abarcadora, total en cuanto al tiempo y a los métodos. Muchas de las mujeres narradoras no han podido alcanzar ese espacio debido a asuntos como los hijos, el trabajo o la relación conyugal, algunos de los cuales no le han dado la debida distancia entre la obra y su propia condición creativa.

¿Por qué promueves y realizas la difusión y realización de ferias literarias como la FIL?
En principio, porque siempre he sido una mujer militante. Me considero comunista, pero siempre he militado, desde chiquita en cosas que siguieran el ideal que difundo. He participado en partidos de izquierda, soy feminista. Mi forma de militar en la literatura es a través de esta contribución en la cual se unen dos parte muy claras de mis raíces, la que te nombré anteriormente y además mi lado comercial, empresarial, que viene de mi ascendencia japonesa. En ese sentido la Cámara Peruana del Libro me ha dado plena libertad y ha apostado por un equilibrio que me parece saludable. Acá se mezcla la empresa y la cultura. La idea es darle a la literatura un espacio que además sea rentable, defendiendo siempre la creación literaria, que al fin y al cabo debe ser libre. La literatura en ese aspecto no debe tener mayor militancia que la estética ni mayor compromiso que la autenticidad.

Tú escribiste un buen poema sobre el río Amazonas, en el que aludes al conquistador Francisco de Orellana. Además, has trabajado mucho en la difusión del medio ambiente en la serie Poetas por la Naturaleza, donde incluso publicaste un inédito de Ernesto Cardenal sobre el zoológico de Quistococha, escrito a propósito de su reciente viaje a Iquitos ¿Por qué es la Amazonía tan atrayente para tu literatura?
Yo creo que la Amazonía es atrayente no sólo para mi literatura, sino para la literatura en general. Ya hemos visto los extraordinarios libros donde se retrata de manera vital y maravillosa a la selva, como en los casos, por ejemplo de Horacio Quiroga o de Mario Vargas Llosa en La Casa Verde. Me interesa mucho la Amazonía por mi posición ecológica y militante, y es un deber defenderla ante cualquier circunstancia que pueda afectarla. No existe mejor materia prima para la creación que la propia Amazonía.

¿Cuál es tu relación con la literatura y el devenir amazónicos?
Pues claramente a través de mi gran amiga Ana Varela, a quien admiro por su poesía, por su inteligencia, además con quien he tenido uno de los diálogos más ricos y productivos de mi vida. Además, como ya dije, por la influencia y atractivo que ejerce una ciudad como Iquitos, que me parece, fuerte, preciosa, mágica, un lugar con raigambre e identidad, aire, luz y vida propias. De la selva yo prefiero la zona alta, pero el único lugar de la zona baja que prefiero es Iquitos. Uno siente que no es una ciudad transitoria, sino autónoma y sólida, no es flotante, sino que está construida sobre “su sombra que cae sobre sí misma”.

Finalmente ¿cuál sería el mensaje que dejarías a la comunidad intelectual y literaria loretana?
Pues yo les sugeriría que sigan como están. Alguna vez Ana Varela me dijo “Iquitos es el mundo” y no deja de tener algo de razón. Eso sí, yo indicaría que se organizara, que tuvieran una propuesta colectiva. El arte y la cultura son propuestas políticas. En Loreto les indicaría además que hubiera más librerías, más consumo, más estrategias de promoción de lectura. Hay que crear en el poblador el desarrollo del ego, aunque sea a través del estereotipo, de que es más importante a través de lo que más sabe, de que es más culto. Y esa única forma de ser más culto es leyendo más. La lectura finalmente es una vacuna contra el individualismo egoísta, nos hacen menos pedantes y más maduros y nos indican al fin y al cabo que un ser humano solo no es más que un bagrecico en este inmenso río amazónico.


27 julio 2006

KATENERE, REVISTA CULTURAL AMAZONICA

KATENERE, la revista cultural de Pro & Contra, que busca dar un espacio al arte y sobre todo a las nuevas voces en la literatura, será presentada la próxima semana y distribuida de manera gratuita a nuestros suscriptores. En este número se reseña la publicación de autores loretanos realizada por el Gobierno Regional de Loreto y una serie de nuevos artículos de Javier Medina, Eloy Jáuregui, Francisco Bardales, Miguel Donayre, Jorge Coaguila y Percy Vílchez. Este número está dedicado al libro y a las ferias que se realizan en torno a las producciones bibliográficas. Además una entrevsita especial a la poeta y directora cultural de la Cámara Peruana del Libro, Doris Moromisato. Ya el grupo de periodistas está trabajando el tercer número.


26 julio 2006

FREDERICA BARCLAY GANA PREMIO PAUCAR EN FESTIVAL DEL LIBRO DE IQUITOS

Con la entrega del premio Paucar 2006 a la antropóloga de la Pontificia Universidad Católica, Frederica Barclay Rey de Castro, se inauguró la XXI Feria del Libro en el Centro Pastoral del Vicariato Apostólico de Iquitos con presencia de las principales autoridades de la región. Momentos antes Ricardo Soberón ofreció la clase magistral “La ambigüedad de nuestras aguas”. Los invitados asistieron a la procesión de la cultura y en la Plaza de Armas donde se armaron los stands de libros. La estudiosa de la Amazonía y el Alcalde de Maynas rompieron la cinta roja blanca y la tinaja oficializando el inicio de las actividades culturales.

“Me gustaron los helados”

Frederica Barclay es una estudiosa de la Amazonía que está muy vinculada al Centro de Estudios Teológicos de la Amazonía Peruana –CETA-, institución que organiza esta Feria y afirmó que en realidad nunca dejó Iquitos. “Me gustaron sus helados”, dijo minutos después de recibir el premio.

¿Ha cambiado mucho el Iquitos que usted dejó al de ahora?
Diría que sí. Ha crecido mucho, hay mayor presencia de gente de afuera. Pero sigue siendo una linda ciudad.

La gente de afuera es una amenaza o un aporte para la cultura
No es una amenaza, pero se requiere que la gente de acá haga un esfuerzo por mantener vivas las tradiciones para que no pierdan en el nuevo equilibrio de fuerzas. Pero no, no cualquier lugar se enriquece con otros aportes.

¿Este es un proceso natural e histórico?
Claro. Las migraciones internas son la base de la construcción del país.


25 julio 2006

LAY FUN EN LA CIUDAD

Mi primer encuentro con la ciudad, luego de una temporada fuera de ella, fue un intento de robo sobre un motocarro, en el trayecto del aeropuerto a mi casa. Los vulgares ladronzuelos, cuatro más o menos, magros y aparentemente fumados, pero completamente avezados, aprovechando una lluvia torrencial, en plena calle Aguirre, intentaron despojarnos del maletín de pertenencias y de una estatua de yeso que simbolizaba a Fray Martín de Porras. La oportuna pericia del motocarrista y mi buena suerte (otros lo llaman milagro, dado el santo que llevaba al lado) pudieron esquivar un despojo en pleno centro de la ciudad, en horario normal y a la vista y paciencia de los transeúntes.

La delincuencia es un grave problema que ya parece endémico y que me ha parecido impactante. Una ciudad crispada, violenta, donde el crimen, el robo, las amenazas, los chantajes empiezan a dominar a varios de sus habitantes es el triste espectáculo que se pone de moda. Pero alguien, justiciero, se vislumbra en el horizonte, con cuatro patas y cola, con la lealtad propia del mejor de los amigos del hombre y – salvo las payasadas y el burdo sensacionalismo que la prensa irresponsable hace del tema – coloca el asunto como parte de un debate necesario y urgente, mucho más complejo del que algunos quisieran aplicar.

Porque es muy cierto que varias gentes que se dicen analíticas y “progres” aún no han entendido el verdadero impacto que el caso Lay Fun ha tenido en una sociedad como la nuestra. Tampoco se han percatado de las aristas que exceden la anécdota policial y se convierten en señales de la descomposición y decadencia de los sistemas de seguridad del estado peruano, los cuales un perro, mediante una acción límite, ha expuesto sin medias tintas.

Como en el far west de las películas de Sergio Leone y Clint Eastwood, Lay Fun ha aplicado la inevitable filosofía darwiniana de matar o morir en medio de una lucha por la supervivencia de la especie. Con las armas de la justicia y de la ley, arguyendo legítima defensa y en una reacción inevitable de extrema urgencia (lo que los penalistas parafrasearían como “estado de necesidad exculpante”), el can impuso el orden en el pequeño depósito donde habitaba, donde comía y convivía en perfecta armonía con sus miembros humanos, por lo demás. Bastó que un delincuente prontuariado intentara asesinarlo, para que el voluminoso justiciero tuviera una reacción propia de su raza y propia, además, de cualquier ser vivo que se encontrara en situación de peligro inminente.

Pero lo que en un perro es instinto, en el ser humano es racionalidad. He ahí el dilema. Por eso nuestro héroe contemporáneo ha remecido los cimientos de esos mecanismos de autodefensa ciudadana paquidérmicos, ineficientes, inútiles para combatir la formidable ofensiva delincuencial que atraviesa nuestro país y también en Iquitos. Los que de alguna manera cubrimos prensa nos encontramos todos los días con casos que chocan con nuestras propias ideas sobre el valor de la inteligencia humana. Y no sólo por el crimen, sino también por la violencia y la corrupción. Pero una cosa es mirarlo con ojos de taxidermista y otra, muy diferente, es sufrirlo en carne propia. Y la verdad es que ya nadie se siente seguro en la ciudad.

Ante esto, resultan risibles y patéticas las invocaciones de la Policía Nacional, ineficiente por partida de nacimiento. Una institución podrida desde adentro, al cual el Estado mata de a pocos con insuficiente presupuesto y pésimas condiciones legales no puede competir con los mafiosos y cuando se enfrenta solo, inerme, creyendo en la majestad del orden, le cae un balazo asesino como al juez que tuvo la “osadía” de encarcelar a algunos miembros del Cartel de Tijuana.

Y resulta patética la ineficiencia absoluta de esos tipejos que manejan el Serenazgo de Iquitos. Lo único que he visto en estos días ha sido que las camionetas asignadas por la municipalidad a ejecutar dicha misión son las más conchudas que pueden tener sobre las pistas, porque estacionan donde les da la gana, usan inútilmente las bocinas para correr impunemente, usurpando una función que ni las ambulancias en casos de emergencia pueden hacer. Hace unos días me contaban que en una zona equis los vecinos atraparon a un ladronzuelo, le escarmentaron ejemplarmente y luego llegó una unidad del famoso Serenazgo con el fin de depositar al malhechor en la comisaría. Lo cierto es que el delincuente nunca llegó a su destino porque terminaron soltándolo antes de que llegara a donde debía.

Es imposible que la ciudadanía confíe en este tipo de gentes. Y ante ello, Lay Fun resulta el símbolo de la profilaxis. Y con ello todos los perros que estarían dispuestos a defender a sus amos ante la arremetida criminal de algunos miserables. Lay Fun resulta haciendo la profilaxis que el gobierno no es capaz siquiera de esbozar; es el detonante de una mecha larga que puede más adelante convertirse en una bomba nuclear. Ciertamente, el perro que hace unos días salió del centro antirrábico en olor de multitud está cumpliendo la labor que algunos no saben o no quieren hacer. Es el clamor ciudadano trasladado a justicia con cuatro patas. Si Lay Fun es tan eficiente en la defensa y tan noble en las querencias (como lo atestiguan todos quienes lo conocen) un poco más hasta nuestra desesperación podría llevarnos a solicitarle que asuma el Ministerio del Interior o alguna Alcaldía. Estoy seguro incluso que lo haría mucho mejor que algunos “cerebros” en estado de oxidación que nos gobiernan.

24 julio 2006

PISHCOTILLA

Escribe: Gino Ceccarelli


Desde niña todos la llamábamos “Shantuca”. Sandra era muy bonita, alegre y tenía un cuerpo escultural que rápidamente llamó la atención de todo el barrio y provocó, muy a pesar de ella misma, ciertos apetitos amorosos y carnales.

Sonreía pícaramente y partía a la carrera cada vez que alguien le lanzaba piropos. Jugaba con los muchachos y las chicas desde la mañana hasta la noche. Le gustaba ponerse un pantaloncito corto de color rojo lo que hacía mucho más llamativo su cuerpo y sus bien torneadas piernas.

Su belleza no tardó en hacerse popular y muchos jóvenes (también algunos viejos con auto) venían de otros barrios para verla y tratar de conquistarla. Ella conversaba con todos, pero de igual manera rechazaba a todos los pretendientes. Tuvo todo tipo de insinuaciones, desde colegiales que le proponían ser su enamorado, algunos que le hacían propuestas de viajes, otros se mandaban con proposiciones indecentes y bastante vulgares, y los mayorcitos le planteaban incluso matrimonio. Sandra no aceptaba nada ni a nadie, lo único que quería era jugar.

De repente comenzó a pasarse la voz de que había salido con fulano, que la habían visto por Morona Cocha con sutano y que se veía a escondidas con mengano. Algunos muchachos contaban de sus virtudes como besadora y otros más osados describían su talento en la cama. Muy pronto la gente del barrio empezó a mirarla de reojo, algunas vecinas ya no le saludaban, varias de sus amigas la rechazaban y el apetito y la curiosidad de los hombres por salir con ella y “comprobar” sus virtudes amatorias se fue acrecentando.

Su fama de “pishcota” rebasó los límites del barrio y poco a poco comenzaron a señalarla como mujer fácil e insaciable. Esta fama llegó hasta el colegio y el chisme de que era una “jugadora” se propaló como reguero de pólvora hasta que un día la directora citó a la mamá de Sandrita para advertirle de los desvaríos y “deseos incontrolables” de su hija que le estaba dando una mala reputación al colegio.

A Sandra no le importaba ni hacía caso de los chismes que se inventaban sobre ella. Seguía sonriendo a todos, jugando sola y corriendo despreocupada. Un día, uno de los jóvenes del barrio que le había propuesto tener relaciones y que fue rechazado con risas por parte de Sandrita, en su despecho contó a todos que se la había “tirado” y le cobró cuarenta soles.

A la mañana siguiente en la fachada de su casa aparecieron pintas que decían: “Shantuca, la putilla del barrio” y “perrita rica”. Esa misma tarde la mamá contrató pintores para borrar las pintas. Todo el barrio salió a la calle para ver como cubrían de colores la fachada y se burlaban escandalosamente. Algunas vecinas insultaron a la mamá acusándola de no saber criar hijas y hasta le dijeron que si su hija era así era porque seguramente la madre daba el ejemplo.

El papá de Sandrita era un comerciante que pasaba la mayor parte de su tiempo en Yurimaguas y en una de sus venidas se enteró de la fama de su hija y le metió una paliza feroz que le dejó las piernas marcadas, y si no la botó a la calle fue gracias a las súplicas de la madre.

Nunca nadie le había visto salir con ningún hombre, ni siquiera a la salida del colegio se dejaba acompañar ni tampoco subía a las motos o carros de los shereteros que la acosaban porque se habían enterado de su reputación de viciosa. Aun así su fama de pishcotilla se fue acrecentando al punto que en el barrio nadie quería jugar ni conversar con ella. Todo lo que recibía era insultos y besos volados acompañados de frases soeces. Hasta los niños le lanzaban piropos vulgares y le huicapeaban con lo que sea.

A pesar de que los fines de semana no salía a la calle, un día corrieron la voz de que el último domingo la habían visto en una playa en el río Nanay con tres hombres a la vez. Todos sabían que Sandrita no salía, pero aun así prefirieron creer que era a ella a la que vieron en la playa en una orgía. Tantas cosas inventaron que incluso alguien dijo que en su cuarto tenía imágenes del diablo y hacía ritos satánicos.

La situación se volvió realmente insoportable. A su mamá no le quedó otra cosa que vender la casa y mudarse a Lima donde unos parientes. Simplemente ya no podían vivir en el barrio ni en Iquitos.

El barrio se quedó frustrado. Ya no tenían de quien chismear ni rajar.

A los pocos meses empezaron a comentar que en la otra cuadra había una chica que era secretaria, que vivía sola y que en la madrugada hacía entrar hombres a su casa. El barrio entero había encontrado un nuevo entretenimiento.

Han pasado muchos años, pero aun recuerdo esto con mucha pena y vergüenza.



21 julio 2006

LA FIESTA DEL LIBRO EN IQUITOS

Con el recorrido del tradicional Pasacalle, que este año contará con la presencia del afamado Grupo Nacional de Expresión Teatral “Luna Sol”, el día 24 al atardecer se dará inicio a las diferentes actividades del XXI Festival Regional de Libro, evento cultural que anualmente es organizado por el Centro de Estudios Teológicos de la Amazonía Peruana, la Municipalidad Provincial de Maynas y el Instituto Nacional de Cultura, que durará hasta el día 6 de agosto. Al siguiente día, en la Sesión Solemne Inaugural, el Dr. Ricardo Soberón Garrido, ofrecerá la Lección Magistral titulada “La ambigüedad de nuestras aguas”.

A lo largo de los doce días que durará el Festival se presentarán, entre otros, títulos como: “La Vorágine” del autor colombiano José Eustasio Rivera, de reciente edición ilustrada en Colombia por Silvia Patiño; el Fondo Editorial del Congreso presentará “La Sal de los Cerros” de Stefano Varese en su segunda edición; el CETA presentará los tomos I y II de la “Crónica de las Misiones Franciscanas del Perú – Siglos XVII y XVIII” de Fernando Rodríguez Tena y “Exploración de los Ríos del Sur” de William Miller y otros; “Iquitos, una ciudad, un río” del que son autores un conjunto de escritores loretanos, editado por la Municipalidad de Maynas a principio de año. Por su parte, la Corte Superior de Justicia de Loreto lo hará con “Leyendas y Tradiciones de Loreto” de Jenaro Herrera, en una nueva versión. Finalmente, la novela de Pedro Chung Bartra: “Con un ala sobre la casa de los daltónicos”, el poemario “Quintesencia” de José Carlos Rodríguez Nájar (edición francés-español) y “La Soga de los Muertos”, un catálogo de artistas plásticos editado por Christian Bendayán.

Entre las Exposiciones figuran “Grecia: Rostros y paisajes. 1930-1960” de la Embajada de Grecia; “Belén en las canoas” de Augusto Falconí, “Nuestras Raíces”, muestra de restos arqueológicos de los orígenes de Loreto y la exposición de “Tejidos en Fibra”, de los pueblos indígenas del FORMABIAP.

Se ha previsto, además, la entrega del premio Paucar de toda una vida consagrada a la investigaciòn y difusión de la Amazonía a la reconocida investigadora arequipeña Frederica Barclay Rey de Castro.

20 julio 2006

Los retos de Alan García

Algunos indicios nos señalan que el nuevo gobierno de Alan García no será peor que el primero. Ha tratado al menos de meditar algunos aspectos que en la vorágine de su transmisión de mando de 1985 le hubierna importado muy poco, como la confomación de un gabinete ministerial pluralista-equilibrado o el compromiso de mantener los lineamientos principales de una política económica moderada.

Una cosa es lanzar críticas destempladas al modelo gubernamental cuando se ve el partido desde la tribuna VIP - como claramente acometió García en la campaña electoral – y otra, muy distinta, jugar su propio partido con las reglas ya marcadas en el césped sintético. El presidente electo sabe que Alejandro Toledo no lo hizo mal en ese aspecto, aún cuando muchos de sus planes y proyectos quedaron varados en el camino, afectados por su impopularidad o por su inconsistencia práctica y/o material.

García no es un político improvisado (aún cuando sea un estadista poco riguroso y la mayoría de veces incoherente). Sabe que le va a tocar un escenario relativamente calmado en el aspecto macroeconómico, pero va a tener que lidiar con el escenario social. No se descarta un clima de turbulencia, azuzado básicamente por las fuerzas políticas radicales, pero también por la población que ahora siente que está en el deber de exigirle a alguien que cometió una catástrofe mayúscula los costos que significa darle una nueva oportunidad. García no disfrutará la fugaz luna de miel de Toledo, mucho menos la de Valentín Paniagua. Desde el saque, jugará en un terreno que conoce bien, pero cuya composición ha cambiado radicalmente su estado de ánimo.

Obviamente, más allá de todos los escándalos y las omisiones que el saliente gobierno dejó pasar, García sabe también que la valla con que se le medirá en comparación con su antecesor es alta (de ahí que Toledo esté dejando el mandato con la mayor popularidad que ha tenido un presidente peruano en casi cuatro décadas). Y hay cosas que no pueden ser desmontadas, por más que sean asociadas políticamente con intereses ajenos, tales como los programas Techo Propio, Mivivienda o la firma del TLC con Estados Unidos (medidas que algún momento pasaron por controvertidas, pero cuya necesidad y popularidad hacen palidecer a los agitadores violentintas aupados dentro de la pandilla-horda-partido de Ollanta Humala).

En líneas generales, desconfío mucho de lo que pueda hacer García y su partido a favor de la sanidad económica del país. Tenemos la infame experiencia de los ochenta y una larga tradición de clientelismo y sectarismo que no desaparecen de la noche a la mañana. Sin embargo, hay que estar seguros también que esta vez el humor de la opinión público no va a ser flemático ni muy comprensivo. El APRA recibe un país más o menos enrumbado, al cual debe reactivar y dotar de institucionalización, de justicia constante de condiciones de salud y educación dignas y una bonanza que se refleje en la mesa popular. El nuevo presidente, en ese sentido, está condenado a no errar.

18 julio 2006

AMAZONAS (Un poema imprescindible)

Escribe: Doris Moromisato

Cuajado de dudas, don Francisco de Orellana cruzó el inmenso mar. /
Las constelaciones lo guiaron a través de la/ Larga Noche.
Remontando el olor salobre de la azul/ distancia
palpó las costas de nuestras tierras con/ sumo cuidado
como saboreando una dulce naranja, recién/ abierta.
Sobre el lomo de su bestia tramontó las/ altas montañas
y al descender el último peldaño
continuó cabalgando frágiles canoas
hasta ser devorado por su inexorable destino.
Absorto, descubrió la lluvia convertirse en interminable lodo
lepidópteros y guacamayos imitando carnavales
lagartos devorándolos y serpientes enroscadas a las ramas
como en el Libro de las Sagradas Escrituras que leyó desde muy niño
Pero la creación del mundo no cesaba allí,
de la frondosa planicie de los árboles
se abría como una inmensa herida
un tajo dulce y caliente de agua.
¿Qué mar es éste dentro de este verde mar
que rodea mis espaldas?, preguntó Orellana.
¿A dónde ha de conducirme si remonto sus tibias aguas?
Nadie respondió, pues los mapas aún se hallaban inconclusos y sólo él
hallaría la respuesta si surcaba, espada en mano,
la corriente inédita y obscura...
Lo veo venir, desde muy lejos, barbado y sucio
lleno de sudor y picado de innumerables insectos,
con la oca abierta incapaz de comprender tanta belleza
tanta vastedad poblada de orquídeas y otorongos
de camungos y sajinos conviviendo juntos
como en los primeros días de la creación.
Lo escucho aullar de dolor bajo el peso de una inmensa boa
ahuyentando con sus gritos a los manatíes que lo observan azorados
temblar bajo la tormenta cuando la balsa inclina peligrosamente su proa.
Lo presiento herido, curando con saliva las llagas de su cuerpo;
lleno de deseo y maldiciendo al cielo, cuando por entre los árboles
atisba a las guerreras lavar sus fieros cuerpos con el agua de la lluvia
y ellas
sólo buscan su rojo corazón para depositar el veneno de sus flechas.
Lo veo dormir bajo luna llena, despierto detrás de su ojo cerrado
espantando a los zancudos que lastiman su piel mediterránea
(herético, soñando ser Dios cubierto de luciérnagas y malezas).
Lo imagino levantarse a medianoche a refrescar su frente
empapado e insomne, intentando apagar la fiebre y la locura
a la que he encomendado su vida este insoportable descubrimiento...
Lo veo frente a mí, varios siglos después
convertido en frío mármol, desafiándome
mientras saboreo un helado de limón y espero
que de ese mismo río tú vuelvas a mí
surcando mi infinita tristeza
verde
con la ropa cubierta de luna.


Doris Moromisato (1962) es una las más representativas poetas de la nueva generaciòn femenina peruana, autora de libros mayores como Morada donde la luna perdió su palidez (Lima: Cuarto Lima Editores, 1988), Chambala era un camino (Lima: NoEvas Editoras, 1999) y Diario de la mujer es ponja (Lima: Ediciones Flora Tristán, 2004).

17 julio 2006

Retratos y Paisajes, Fotografía Griega 1930-1960.

El Comité Organizador del XXI Festival Regional del Libro de Iquitos, gracias al apoyo de la Embajada Griega en Perú y el Archivo Fotográfico del Museo Benaki de Atenas que puso a nuestra disposición el material fotográfico, tiene el agrado de presentar la muestra Retratos y Paisajes, Fotografía Griega 1930-1960.

El trabajo fotográfico, producido en los años 30 hasta los años 60, fue determinante para la formación y la creación de la identidad griega en este campo. Como fue el caso de otros campos de la cultura asociada con la famosa generación de los años 30 en Grecia, los artistas fotógrafos también estaban comprometidos con la investigación y la definición del carácter único tanto a nivel individual como colectivo del espacio griego en el que viven y crean. Evidentemente, no se mantienen al margen. Sus maneras y sus técnicas establecen siempre un diálogo con las tendencias y las corrientes artísticas del arte europeo de la época.

El ojo del fotógrafo griego, la elección de los elementos que invaden su cuadro, así como su ángulo visual, están llenos de atenciones hacia las personas y de nostalgia por los lugares.

Además muchos de estos lugares de la Antigüedad Griega están ligados con personajes contemporáneos y crean así un conjunto simbólico. Por estas razones la obra fotográfica del mencionado período es calificada como fotografía griega clásica.

La muestra se inaugura el miércoles 19 de julio en la Prefectura y estará abierta al público hasta el cuatro de agosto, de lunes a viernes de 9 de la mañana a las 21:00 horas, y los sábados de 9 de la mañana a las 20:00 horas.

16 julio 2006

La guillotina universitaria contra la corrupción

Debo reconocer que el último escándalo de corrupción que remece los pantanosos cimientos de la universidad nacional de la amazonía peruana (UNAP) es como para abalanzarnos hacia el Muro de los Lamentos, llenar esta hoja de improperios y adjetivos infames, pero ciertos y justos. Sin embargo, por más que pueda movernos el lado más visceral y pasional de la anécdota, ésta también resulta una maravillosa oportunidad de reflexión sobre las deplorables condiciones en que transita la deontología mutante de sus funcionarios, así como los aspectos administrativos, funcionales, académicos y, obviamente, aquellos que emanan de los estudiantes.

No creo que sorprenda mucho que una nueva sobrevaloración se haya descubierto. Quizás lo anecdótico es que el terreno semi pantanoso en donde se pretendía edificar el nuevo edificio cueste “formalmente” casi dos millones de nuevos soles dentro, pero cuyo real valor no pase de los quinientos o seiscientos mil. Lo novedoso de esta práctica es el especial énfasis en el descaro, la aparatosa y articulada metodología del engaño que han llevado a cabo los pretenciosos y huachafos que se alucinan dueños de la universidad para desfalcar a sus anchas, sin asco, con harto cinismo.

Honestamente, nunca creí en la capacidad de Herman Collazos para manejar con cierta dignidad a la UNAP. Aunque la gestión de José Torres Vásquez no fue un lecho de rosas (recordemos que Torres estuvo diez años en el rectorado y que cualquier figura se desgasta en tan largo periodo de tiempo), su legado parece monumental e impoluto ante las travesuras de este nuevo mandamás.

Collazos fue vicerrector administrativo de Torres, así que no puede alegar desconocimiento, falta de preparación o ignorancia. Mi tesis en ese sentido es la siguiente: Collazos no cometió el presunto acto malhechor – en colusión con sus colaboradores más cercanos y el propietario del terreno, por lo demás - porque no sabe nada de administración y gobierno universitario. Collazos es un trome, un tiburón, un ya-no-yá del siempre rentable arte de la flexibilidad en la correcta marcha de los dineros públicos. Sabía los beneficios, el procedimiento y, claro, parece también, cuáles eran los escrúpulos que deben ausentarse para acometer contra el caudal ajeno. En esta operación no estuvo solo.

Sin embargo, he aquí otra verdad, que debe doler y calar hondo: Collazos fue electo en el cargo en asamblea extraordinaria por algunos de quienes ahora reclaman airadamente su destitución, muchos de los cuales no les importó en absoluto los cuestionamientos que ya empezaban a aparecer en dicha oportunidad. El señor Collazos exhibía orgulloso una foto al vuelo con el baixinho Romario, astro del fútbol universal, como gran currículo para acceder al máximo cargo educativo regional. Los otros aplaudieron (seguramente motivados y estimulados por ciertos “argumentos”) y levantaron el pulgar. Ahora se quejan todo y lloran por nada para cuando a veces el Rector se olvida de ellos.

No tuve el honor de estudiar en una universidad loretana. Sí, en cambio, tuve el enorme privilegio de poder hacerlo en una de las mejores universidades nacionales. Una de las cosas que más me alejaban de la UNAP y la UPI, más allá de sus evidentes limitaciones materiales (que son eso, cuestiones materiales que podrían ser solucionadas con fondos económicos que se gastan en otro tipo de frivolidades estilo concursos de belleza, borracheras promocionales, etc.), era el grado de pendejada institucionalizad. El relajo y la corrupción están tomando visos de habitualidad y costumbre en la UNAP (no sólo en ella, pues la UPI también ha sido presa de problemas similares). Y no es culpa de la parte ejecutiva solamente. Hay casos cotidianos en los cuales es muy justo que se perciba indignación y vergüenza ajena.

Resumo: durante el tiempo que fui estudiante universitario jamás observé que un funcionario administrativo manejara como le diera la gana los fondos. Jamás observé que los profesores fueran conminados por los propios decanos de facultad a tomar exámenes sustitutorios para salvar a los desaprobados (como en la Facultad de Medicina). Jamás observé que los docentes supieran menos que los alumnos. Jamás me enteré que un supuesto docente de Derecho del Mar pidiera apoyo a un asesor parlamentario para que le hiciera el syllabus de un curso que dictaría y del cual no tenía la más mínima idea. Jamás observé que los alumnos compraran a los docentes sus notas y que hubiese una mafia de las fotocopiadoras de exámenes para venderlos al mejor postor, con la participación activa de los “dirigentes” universitarios, muchos de los cuales son unos venerables ineptos, aspirantes a comechados viviendo de su verborrea, de su prepotencia y de sus “arreglos debajo de la mesa”. Jamás observé que la “política” universitaria fuera un pretexto para los privilegios más descarados a favor de los que tienen la sartén por el mango. Y, claro, jamás observé que a una personalidad mundial como Ernesto Cardenal se le impidiera realizar una charla con los alumnos debido a que podía “soliviantar” las mentes juveniles con “ideas subversivas”.

Las obvias diferencias entre egresados de diferentes centros de estudios emergen al momento de confrontar capacidades debido precisamente a estas situaciones. En tanto, el bajo nivel de la universidad loretana es evidente y sólo la voluntad de los cientos de jóvenes pujantes, de los docentes honestos y profesionales (que hay varios), de los dirigentes íntegros y no demagogos (pocos, pero los hay), los cuales se sobreponen a estas adversidades y hacen honor a la frase “el hombre hace a la universidad” puede aminorar en algo este desalentador panorama.

Pero para que se inicie una nueva era primero es necesario descabezar a la gestión corrupta. Hace falta un golpe de efecto, un gesto de dignidad y decencia. Es necesaria una actitud firme, jacobina, noble ante la decadencia. Y esa actitud es la destitución inmediata de quien encarna los males anteriormente citados. De los propios miembros de la comunidad universitaria depende su futuro y su progreso. Es hora de simbolizar metafóricamente la guillotina que acabó con la prepotencia y la podredumbre de los sinvergüenzas. Ojala tengan suerte y apoyo en la iniciativa. Desde esta trinchera les brindamos solidaridad.

14 julio 2006

EDITAN 11 OBRAS LITERARIAS DE AUTORES LORETANOS

Un total de 11 mil unidades de libros que contienen obras de autores loretanos y cuya edición fue financiada por el Gobierno Regional de Loreto, arribarán en las próximas horas a la ciudad de Iquitos, procedentes de la ciudad de Lima donde fueron impresas por “Editora Konygraf”.

Como se recuerda, el Gobierno Regional convocó el 2005 a un concurso para seleccionar once (11) obras literarias de autores loretanos, como parte del proyecto de “Promoción de la Educación y Cultura Regional”, encargándose su evaluación a Comité Editorial, conformado por reconocidos escritores como: Félix Humberto Morey Alejo, Armando Ayarza Uyaco, Manuel Marticorena Quintanilla, Olga Isuiza Mozombite y Carlos Macedo Guevara.

En este marco, se aprobó la edición de once libros que contienen obras de 15 autores por lo que se ha incluido en un libro a 4 autores y en otro a dos autores. Por cada libro se ha impreso un tiraje de mil ejemplares, que serán presentados próximamente en ceremonia pública por el Presidente de la región, Robinson Rivadeneyra Reátegui.

Cabe recordar asimismo, que el Gobierno Regional de Loreto, en ceremonia realizada el pasado 07 de junio, en la sala de reuniones de la Presidencia del ente regional, se hizo entrega de cheques correspondientes al pago por derecho de autor, a los 15 escritores cuyas obras fueron seleccionadas.

Ellos son: Juan Andrés Sicchar Vílchez (“Plegaria de los vencidos”), Jorge Rojas Panduro (“Corneta de Ilusiones”), Edgardo Pezo Pérez (“El día que se hizo noche”), Jaime Vásquez Izquierdo (“La Guerra del Sargento Ballesteros”), Carlos Daniel Vásquez Pinedo (“Hostal Amor”), Armando Almeida Nacimento (“La Huimba”), Arnaldo Panaifo Teixeira (“Palabras para el Shamán” y “Cushuri”), Moisés Lozano Mego (“El enigma de los Yacurunas”), Remigio Reátegui Borges (“Humo en la Frontera”).

Asimismo, Eleazar Huansi Pino (“Cuento de Amanecer” y “Lluvia de Verano”), Fernando Fonseca Zumaeta (“Manuscrito de un Ermitaño”), José Vásquez La Torre (“Onix”), Anunciación Hernández Grández (“La Rueda”), Julio Alex Noriega Montero (“Canción de los Bosques”) y Cruz Guillermo Inga Girón (“Ni el último árbol”).

La impresión de estos 11 libros constituye un primer paso dentro del proyecto de “Promoción de la Educación y Cultura Regional”, puesto en marcha por el Gobierno Regional de Loreto, para rescatar y revalorar a los autores loretanos, proyectándose a futuro la reedición de obras literarias de autores amazónicos.

13 julio 2006

¡NO MALTRATEN A "LAY FUNG", EL PERRO GUARDIAN!

El Ministerio Público investiga el caso y decidirá en los próximos días la suerte del perro guardián de raza Rottweiler que provocó la muerte de un delincuente que intentaba ingresar en una cochera, que también funciona como almacén de artefactos electrodomésticos, en el centro de Lima.

Nadie sacrificará a 'Lay Fung', porque eso no es justo", expresaron los trabajadores de la cochera ubicada en la avenida Abancay 627, centro de Lima, lugar donde el perro atacó a mordiscos a la víctima, quien respondería al nombre de Wilson Paredes Quispe (30), 'Pitufo'. Agregaron que al animal se le debería hacer un monumento, pues sólo cumplió con su deber y se portó a la altura de un guardián. "Nosotros haremos lo posible para salvar a 'Lay Fung'

El can de cuatro años está internado en el Centro Antirrábico, donde permanecerá hasta el 22 de julio, en observación de los veterinarios que determinarán si tiene o no rabia.

Las pruebas a las que son sometidos los canes miden su capacidad para prestar un adecuado servicio en alguna de las especialidades mencionadas, así como su condición física para el entrenamiento.

La Asociación Amigos de los Animales aseguró que la ley 27596, sobre el régimen jurídico de los canes, ampara al perro guardián. Según el régimen jurídico de canes, los perros que ocasionen muerte o heridas severas a una persona deben ser sacrificados; sin embargo, esta misma norma exceptúa a los animales que actúan en defensa de la integridad de sus dueños, de la propiedad privada de éste o en defensa propia.

Según el Código Sanitario, está prohibido rescatar un animal potencialmente peligroso, "si no ya lo hubiésemos recogido", agregó un vocero de la mencionada institución.

La Policía Canina no puede admitir como donación al citado perro de raza Rottwailer debido a que el animal tiene cuatro años de edad y el límite para el ingreso a esta dependencia policial es de dos años de edad.

El abogado Luis Lamas Puccio precisó que los dueños de 'Lay Fung' podrían ser procesados por homicidio culposo o doloso, de comprobarse que hubo una negligencia previsible, al exponer la vida del ser humano a las agresiones del can en un lugar público. "Podrían ser condenados a seis años de prisión. Por la ferocidad con la que actuó el animal, deberían sacrificarlo porque es un peligro para la comunidad", refirió el letrado
.

12 julio 2006

LAS BOLAS DE MATERAZZI: EL PLATO "GOURMET" DE LA MAMA DE ZIDANE

Malika Zidane, madre del centrocampista francés Zinedine Zidane, habría afirmado que quiere que le sirvan "los testículos" del defensa italiano Marco Materazzi "en un plato" si se confirma que éste la llamó "puta terrorista" durante la final del Mundial entre ambas selecciones.

Malika Zidane considera que estos insultos fueron los que propiciaron que su hijo agrediera a Materazzi dándole un cabezazo en el pecho -acción por la que fue expulsado- en la prórroga de dicho partido.

"Estoy muy disgustada por todo lo que he oído. Alabo a mi hijo por defender el honor de su familia", habría manifestado Malika Zidane, convalenciente de una enfermedad, a sus amigos, según publica hoy la web del diario sensacionalista británico 'The Mirror'.

"Sólo puedo sentir desprecio por Materazzi y, si lo que dijo es eso, entonces quiero sus testículos en un plato", habría afirmado la madre de Zidane, siempre según 'The Mirror'."Nuestra familia está muy triste de que la carrera de Zidane haya acabado con esa expulsión, pero al fin y al cabo él tiene su honor. Algunas cosas son más importantes que el fútbol", añadió.

Materazzi ha reconocido que insultó a Zidane, aunque niega haber llamado a nadie "terrorista" ni haberse metido con sus familiares.

11 julio 2006

DENNIS FALVY: ¿LOCO O PATAN?

El economista Dennis Falvy amenazó a su ex pareja María Isabel Costa de asesinarla y hacer lo mismo con el hijito de ambos. "Yo soy un viejo decrépito y no importo", agrega en un audio difundido en 'Magaly TV', insinuando que se suicidaría después de cometer el horrendo crimen. "Estoy pensando en morir juntos y llevarnos al niño. No hay forma que me ganes, lo que quiero es pelear contigo cuatro años y más para que veas con quién te metiste, maldita, me has cag... mi honor, me has puesto a nivel de la comisaría, de la Magaly, me has hecho lo de que has querido", señala.

Incluso le da ribetes políticos a su amenaza y advierte que hará que despidan de su trabajo a la madre de su ex pareja. "En el próximo gobierno voy a tener mucho más poder que el que tengo. Porque cuando quiera voy a ser ministro de Estado. Dile a tu madre que no me puede hacer nada y si es necesario viajaré hasta Washington, maldita. No me importa nada, acuérdate que uso pistola, te voy a romper todo lo que tengas de huesos en la cara y no me van hacer nada porque voy aducir locura", agrega.

Más adelante, le advirte a María Acosta que, aunque huya, la va encontrar 'en el in-fierno'. "Te voy a cortar en pe-dacitos, maldita, te liquido".

Por su parte, Dora Garrido, abogada de Acosta, informó que hoy Dennis Falvy y ella tendrán una diligencia de conciliación en el 12 Juzgado de Familia. Allí la letrada espera que Falvy prometa alejarse de ella y de su menor hijo.

En tanto, Patricia Simons, abogada de Falvy, afirmó que la denuncia de Acosta, es su 'modus operandi' y que con su anterior pareja hizo lo mismo. Agregó que la mujer no le deja ver a su hijo.

La congresista electa Rosario Sasieta señaló que "la mujer está siendo 'asesinada' por reclamar derechos básicos, como pedir alimentos al padre de su hijo". Dijo que buscará la sensibilización de los jueces y médicos legistas para la rápida y merecida sanción de quienes sean culpables de agresión física y sicológica contra la mujer.

tomado de Diario Trome

LA HERENCIA POLICROMA DEL AYAHUASCA

Lo primero que impresiona del libro-catálogo La Soga de los Muertos, presentado el miércoles 28 de junio en el Centro Cultural de la Universidad San Marcos, es la explosión de colores que se encuentran difusos a través del trabajo plástico de Harry Chávez, el cual sirve además como portada de la publicación. Con toques posmo, con una desfachatada y singular visión que excede lo tradicional y lo conservador y se interna en la raíz misma de la experiencia, Chávez realiza un trabajo inolvidable. Hubiera sido un crimen no darle el protagonismo que se merece.

Christian Bendayán, nuestro conocido talento local y curador de esta singular muestra, también lo creyó así. Porque, más allá del evidente e innegable esgrima pop de la daga pictórica de Chávez, sabía que en la evolución estaba la respuesta. E-vo-lu-ción, señoras y señores. Reinvención. Retorno a lo básico para dinamitarlo y volver una vez más al big bang. En la era de la cultura popular, Bendayán señala que todo ya está escrito o mostrado. Lo novedoso estriba en tallar las aristas necesarias, tantas como fuera posible, y darnos nuevamente el mismo producto, pero enormemente diferente. Enormemente atractivo.

Y en ese sentido, Bendayán es a la vez cerebral y revolucionario. Cerebral porque ha sabido lograr un exacto balance de los principales artistas que tocaran el tema de lo mágico y sagrado en las diversas visiones (diversas edades- diversas tendencias, mediante) sobre la base de sus experiencias con el ayahuasca. Revolucionario porque los ha sintetizado en un registro tan particular que al final ha terminado creando un mundo tan complejo que es difícil no aplaudir. De pie, inclusive.

Bendayán, no ha sido chauvinista, pues sabe que contar un vuelo ayahuasquero no es patrimonio exclusivo de los amazónicos de origen biológico, pero al mismo tiempo sabe que es imposible contar la historia de nuestro linaje sin recurrir a la sagrada sabiduría de los ancestros. Nada de pensar en el toé como una postal turística para la National Geographic. Tampoco imaginar que la ingesta será una experiencia meramente terruñera. Para más señas, Harry Chávez, el portaestandarte del libro, no es loretano, ni selvático ni tiene mucho de amazónico propiamente dicho. Pero supo captar la universalidad de esta inmemorial usanza.

Eso sí, en la muestra y el catálogo, que reunió en un mismo proyecto a artistas nativos, populares y urbanos, se destaca lo mejorcito de este arte. Y se nota el cariño con que han trabajado los involucrados. Desde el propio Bendayán, quien me señala que ésta quizás sea su muestra más ambiciosa e importante, en la cual no ha participado como artista, por lo demás. Allí, además está el equipo de trabajo y de edición gráfica, Radio Belén, entre ellos Gaby Germaná, Lala y Sergio Rebaza. Todo esto no hubiera caminado de ningún modo sin el apoyo decidido de Gustavo Buntix y Armando Williams.

Y porque, además, La Soga de los muertos trae un par de bonus tracks de bizarra sintonía y mejor escritura. El primero es esa descripción tan precisa que Luis González-Polar, "Puchín”, hace sobre su experiencia personal. Todo un iluminado el Gordo:

Ayahuasca, chacrunita,/ plantitas de curación,
llamen a todos los espíritus y genios de protección,
chullachaqui, dueño de los montes,/ yushin taita, padre espiritual,
allpa runa, dios de la tierra,/ lamparillas, luces de los ríos,
yacurunas, médicos del agua
ayahuasca, chacrunita, / plantitas de curación.


Además, obviamente, Gino Ceccarelli, en un ensayo escrito a cuatro manos y mil corazones, nos trata de contar la evolución de la pintura amazónica. Sin pretender erudición, es posiblemente uno de los intentos recientes más valiosos por explicar un devenir pictórico loretano y adyacente.

Y, claro está, no podía faltar el trabajo propiamente plástico. Desde artistas de origen nativo e indígena como Pablo Amaringo, Agustín Rivas, Francisco Montes, Yolanda Panduro, Santiago Yahuarcani, pasando por no amazónicos como Juan Osorio, Rocío Rodrigo, Alfredo Márquez, Harry Chávez; incluyendo además artistas loretanos de formación profesional como Nancy Dantas, Rafael Díaz, Ceccarelli,, autodidactas de esecnia indígena y devenir urbano como Iginio Capino, además el legado importante y valioso del tempranamente malogrado pintor bora Víctor Churay, entre otros.

Cierro este artículo citando a Ceccarelli, cuya reflexión seguramente es compartida por Bendayán y todos aquellos que han sentido en carne viva la herencia polícroma del ayahuasca: “Este crisol llamado Selva (...) está destinado a ser, efectivamente, la gran despensa del mundo, pero no de recursos naturales, sino de esperanza, amor y belleza. Citando a (..) César Calvo, esta humilde contribución que hacemos al arte es la proyección de nuestros mayores sueños: como tatuajes en la piel de un gran, inconmensurable, eterno río”.



Ilustraciones (De arriba a abajo):

Foto 1: Mamá Icaro, de Alfredo Márquez
Foto 2: Visión Aérea de la Huaca, de Harry Chávez
Foto 3: El primer goce, de Gino Ceccarelli

10 julio 2006

POCAHONTAS EN EL NUEVO MUNDO (Q'ORIANKA KILCHER VISITO IQUITOS)

Q´orianka Kilcher, la joven actriz de origen peruano que personifica a Pocahontas en la película “The New World” estuvo por una semana por la cuenca del río Corrientes para observar la contaminación de este río por parte de las petroleras y en especial de la OXY y ayer por la noche ofreció una conferencia de prensa donde señaló sentirse muy decepcionada y avergonzada de que una empresa multinacional y norteamericana promueva estos niveles de contaminación por lo que anunció una campaña internacional para frenar este flagelo en los ríos de la Amazonía.

Durante varias horas los fans de la actriz no podían creer que Q´orianka llegaría a Iquitos para estar con ellos en la tercera cuadra de la calle Raymondi donde el Hermano Paul McAuley de la Red Ambiental de Loreto y un incansable luchador de esta causa, también esperaba su llegada de Nauta para dar cuenta, una vez más, de una inspección de los niveles de contaminación de este río.

Durante su intervención Q´orianka, dijo haber visto una serie de efectos de la contaminación sobre todo en los niños por los que se sintió muy apenada. “Me siento triste por lo que está pasando en Corrientes”, dijo en la conferencia de prensa en traducción de Leila Salazar López, representante de Amazon Watch, una ONG que apoyó la llegada de la actriz.

“He visitado los lugares impactados y hemos visto la contaminación y cómo se trata a la gente indígena en esta zona. Hemos visto animales en el petróleo cayéndose, muriéndose, ranas y mariposas. He visto muchos niños enfermos con granos, estómagos grandes, cólicos y mareos, están olvidados, eso me da pena y vergüenza porque una de las compañías que dejó esta contaminación es OXY de Los Ángeles. Una compañía que tiene recursos y que allá (en Estados Unidos) nunca, nunca, hubieran podido hacer esto pero lo hacen acá”, declaró ante la indignación de los asistentes.

Esta visita de Pocahontas se plasmará en la realización de un documental donde se mostrará a los peruanos, pero también a la comunidad internacional como Estados Unidos y Argentina y vean la contaminación que está causando la Occidental. La gente debe saber de donde viene el petróleo y cuáles son los impactos en las comunidades indígenas y el medio ambiente”, declaró Leila Salazar.

Es una pena que la comunidad Achuar está luchando por 35 años, parece que la gente indígena no tiene poder, no tiene voz”, declaró. Por su parte, el hermano Paul McAuley denunció la confabulación entre algunos mandos de la Policía y el prefecto Joaquín Planas para que no esté presente en esta conferencia, pues estuvo citado por la DIVINCRI por el esclarecimiento de las garantías personales y para verificar “su situación legal en el país”. El hermano dejó entrever que detrás de estas amenazas están los intereses de las trasnacionales petroleras.

Pocahontas, recorrió el Corrientes durante una semana y ayer llegó en combi desde Nauta para tomar un vuelo el día de hoy y dar una conferencia de prensa en las próximas horas en Lima e informar de lo que ha visto en Loreto y empezar a generar la sensibilización en las autoridades de Lima, porque acá ya sabemos cómo tratan a los ambientalistas e indígenas.

Tomado de
Diario Pro&Contra

09 julio 2006

UN ESTATE ITALIANA (ITALIA CAMPEON MUNDIAL Y UN HIMNO INOLVIDABLE)

Como ya sabrán, y no seré yo quien los repita, la slección italiana, en parte por suerte, en parte por un orden táctico y una solidez defensiva impresionantes, se ha coronado campeona del Mundial de fútbol Alemania, al vencer dramáticamente por penales a Francia.

En esta oportunidad, sin embargo, creo que es necesario tomar este pretexto para escuchar Un estate italiana, el himno del Mundial de 1990, que los italianos organziaron ydonde terminaron terceros. Sin duda, ésta canción interpretada por Gianna Nannini es uno de las más bellos himnos creados en campeonatos mundiales, lo mejor definitivamente de aquella oportunidad.

Difrútenlo y que la felicidad embargue a todos los italianos.

PD: Ah, Perú quedó quinto en el mundial de fúlbito callejero, realizado en Alemania también. No está mal...

MIRADA DEL BUHO: PREMIO COPE DE POESIA 1987

En 1987, Carlos Reyes Ramírez (Requena, Loreto; 1962), joven estudiante de Biología de la Universidad Nacional de la Amazonía Peruana, dio la clarinada de alerta en la literatura peruana respecto del surgimiento de una nueva poesía, que se estaba cocinando fuera de los extramuros de la cofradía oficial limeña. Esta era fruto de la arrogancia juvenil, es cierto, pero también de un talento que, individual en todos los casos, era inevitablemente apéndice de un movimiento que se agrupaba en torno a una denominación, Urcututu (que el vocabulario regional suele usar para referirse al búho o lechuza, ave de mítica significación en varias culturas y sociedades antiguas y en algunas aún insertas en el presente tiempo- sin tiempo - del mundo moderno), el cual además estaba dispuesto a transmitir muchas ideas, a plantear nuevas propuestas y a sacudir el marasmo del stablishment con dosis de frescura, desenfado e inteligencia a raudales.

Efectivamente, Reyes, a los veinticinco años, produjo una conmoción al ganar (en triunfo compartido con Eduardo Urdanivia) la III Bienal de Premio COPE de Poesía 1986 por su libro Mirada del Búho. Demás está mencionar la extraordinaria importancia del galardón otorgado bianualmente por PETROPERU, considerado el más prestigioso y pecuniariamente interesante que se entrega en nuestro país.

El grupo cultural Urcututu, al que pertenece Reyes, con este lauro, lograba la primera de sus sonadas victorias, pues luego se mostrarían en todo su esplendor Ana Varela y Percy Vílchez , con sendas victorias en los COPE de 1992 (poesía) y 1994 (cuento), respectivamente.

Pero ¿qué es aquello que hace tan valioso, apreciable y admirable en Mirada del Búho? En primerísimo lugar, el hecho de que ésta es la opera prima de Reyes, escrita por él entre los 19 y 21 años. Efectivamente, para aquellos que luego de quince años después volvemos a releer esta obra, seguimos admirando la frescura, trascendencia, así como el nivel superlativo de su lenguaje. Si pudiéramos parafrasear al autor, este triunfo lo encontraba solo, sin bebidas ni latas de pescado en sus exhaustos almacenes, ebrio en busca de territorios donde anclar los párpados, entre Hamlet y Yarapa, entre la lucha de clases y una generación bastarda que contemplaba absorta la decadencia y aún así se mostraba indiferente o cómplice.

Mirada del Búho es, quizás, una aplicación de los más arraigados principios que motivaron al grupo Urcututu a irrumpir en la escena cultural loretana con una propuesta que apelaba a la ruptura y la confrontación pero que tenía una contrapropuesta estética y ética honesta y decididamente atractiva. Cuando Reyes se integró al Grupo Urcututu, con Vilchez y Saavedra –el que falleció en las fatídicas aguas del Napo-, formaron a decir del propio Vílchez, la famosa Banda de los Cuatro, “poetas huérfanos de padre, visitante asiduos de las bibliotecas y polemistas tenaces, que nunca recibieron órdenes de nadie, nunca dejaron de escribir”.

No sería en absoluto retórico señalar que Urcututu es el más importante movimiento literario de la Amazonía Peruana del último cuarto de siglo (incluso de mucho tiempo atrás). Comparten este entusiasmo destacados críticos como el profesor de la Universidad Católica, Ricardo Gonzales Vigil, quien en su estudio “Poesía Peruana del Siglo XX” (1999) señala que junto a Varela (y, acotaríamos nosotros, el extraordinario Vílchez) , Reyes “trae el aporte amazónico a la poesía peruana de los 80.”

Según el estudioso Roberto Forns-Broggi ( “Identidad colectiva y poesía amazónica” En: revista Amazonía Peruana, Tomo XIV, Nº 27, 2000; pp 213-230), las referencias históricas y culturales del libro presentan una voz ancestral que atraviesa a la voz del autor. Lo que Forns-Broggi lee en esta poesía es una “esforzada pertenencia al mundo vegetal, mineral y animal”. Esta perspectiva está “contaminada de historia”, en la que la innegable vocación de la narración fragmentada y terrible de las desgracias colectivas plantea una nueva forma de exteriorización del sufrimiento ante la barbarie manifiesta.

La memoria del narrador de este poemario siempre está en el camino del relato de las grandes derrotas, de lo difícil que significa crear una personalidad cuando se está rodeado del caos. La idea de la caída personal y moral está planteada como asunto inevitable y definitivo (Un barco se aleja de este puerto/ y yo estoy solo sin adonde ir) y la confusión de la pérdida y la elucubración del determinismo desbordan varios versos del conjunto:

Nada ha cambiado mientras caminas bajo
la lluvia. Las calles son las mismas
y una brutal tempestad cae sobre tus ojos (...)
Y reconocimos que bajo nuestro cielo
las bocas se secaron
y siempre hubo una tarde de violencia
para nuestros cuerpos mojados por la lluvia


Podemos replantear la idea que subyace en Mirada del Búho como una lucha profunda del autor contra el surrealismo asfixiante del paisaje y el discurso de sus variados arquetipos: la impetuosidad, traducida en la espléndida pieza que hace mención a la búsqueda de la perfección en Alabanza a Sinacay, la crudeza y violencia de una idea esculpida mentalmente como colectivo (“al amanecer bajo los escombros de la ciudad / dormida, Yaquerana, como una ramera insolente, / espera”), la esperanza planteada en Territorios para Megwal, sentimental como un “onomástico sobre estrellas ardientes”.

Esta es una poesía donde se percibe la educación sentimental, la evocación de las pasiones nacientes y, cómo no, dolientes del ser humano. El aroma temporal y contextual impregna el drama amoroso del poeta y le hace volver a sus ancestrales raíces, cual viaje a la semilla. Aquellos lugares que el narrador nombra con manía de viajero impenitente y geógrafo autodidacta, esas curvas y formas que confronta ante el papel, como erotómano avergonzado, esos rostros y esas líneas esculpidas fríamente cual parientes cercados por la sangre y el oficio, son la invasión del recuerdo. Todos los lugares planteados en el devenir de las páginas se observan ya no como planetas de una galaxia perdida, sino como alimento cotidiano, sonido madrugador dentro de la regresión poética.

Debemos concordar que la poesía de Reyes se sustenta en una visión histórica y existencial que, y aquí reafirmo el tema mayor de la corriente a la que pertenece, va en busca del sueño máximo: el descubrimiento de la utopía. La esencia del libro radica en sus postulados primarios, como la desesperada constatación del triunfo alegría sobre el dolor, de la magia sobre el deterioro. Mirada del Búho es un fresco notable que supo captar la imagen incandescente de nuestros demonios interiores y exponerla con particular desmesura:

Al final de esta densa noche, para vivir
contigo, aprendí de árboles que claman
un nombre que no puedo desterrar
y he caminado entre cuerdas cortadas/ por el viento
pisando el desamor sobre los días negros
(Canción de la isla)


La búsqueda de la utopía ha sido y es un tema recurrente de la obra de Reyes, planteada en sus posteriores libros. En el anteriormente nombrado En el mejor de los mundos se observa que esta travesía en la que participan desigualmente la contemplación, el aprendizaje, la asunción de una verdad que nos inquieta pero no podemos obviar, no son estaciones supersónicas de una Obra total, sino a veces penosos vagones movidos por los carbones de la guerra interior, el tesón y el desencanto. De esa derrota y esa desilusión del encuentro con la felicidad también habla este universo:

En estos días el goce ya no habita
el pecho de las estáticas fieras,
y el recuerdo manso como una ola fría,
es la canción que resopla un informe brutal
mientras el río ha permanecido quieto
igual que una guitarra muda
(Canción muda)

Es verdad que en los versos de Mirada del Búho existe la confesión y la protesta. La confesión es un juego de memoria compartida, en donde se impregna lo armonioso y lo desgarrador. La protesta se encuentra desde la concepción de su tiempo, como en la posibilidad de alejarse del tópico nativo para así construir significados que no pretenden acumular una territorialidad y una dimensión, sino ellos, per se, son toda la dimensión de la ética de denuncia del autor. Del primer ejemplo, tomamos fragmentos de 1983/ los años y del segundo tomamos fragmentos de Hamlet, respectivamente:

Hoy no basta que viajemos como un ave desganada
al amparo de la luna. Porque otro será
nuestro sueño en las noches violentas:
un imprevisible ascenso de cuerpo malherido
y nuestra piedra imposible una lluvia que rompa
los cristales de la memoria que se aventura
(1983/los años)


Ofelia, sumida en charcos de tristeza conspira contra
mi vida
que ya no sirve sino para ahuyentar a los perros
que viajan a otras tierras llevando mi locura y mi
desgano.
Y mi madre duerme
Desnuda en un lecho de piedras, cubierta de
escupitajos
que vomitan las bocas clausuradas por el filo de una
daga.
(Hamlet)

Este es, además, un homenaje a la Abuela, que vendría a ser una manifestación de los recuerdos de la propia abuela de Reyes, María Vela. La Abuela camina contándonos historias de tunchis y aborígenes, de un pueblito perdido cerca a Requena llamado Yucuruchi, de su paraíso de ropa ajena. La Abuela es el tótem que venera en este libro como esperando que su invocación dé la fuerza necesaria para salir airoso de la segmentación. Este homenaje se transforma en ternura con los versos de En el mejor de los mundos, pero aquí adquiere particular y sabia memoria a través de la crónica de los asedios del Yarapa. Según Sui Yun, otra vez, acá se funda es la memoria de la Abuela la que está presente en el poeta “recorriendo la memoria que arrastran tres generaciones, la poesía coactivada por la rabia o inconformismo, retoma la historia, sea de Hamlet, sea la de su pueblo (Requena) para escribir versos de una consistencia novedosa”. De algún modo, todas esas historias de invasiones, esos testimonios del acoso, exterminio y la depredación son imaginería destinada a la exaltación de la poderosa y fantástica memoria de la Abuela:

Gran comarca de lavanderas que atrapan peces
en las bandejas ¿para qué he venido?
¿A qué he bajado a esta llanura? Desde lejos
un agudo anzuelo me devuelve a las cochas,
me ata a la soledad de fusiles montaraces,
mientras al otro lado del mar la guerra II
fenece a tiempo. Ya era tiempo
(Yarapa)

Forns-Broggi señala los nexos comunes de Reyes con otros poetas, en especial poetisas, que tienden a identificarse con la naturaleza que los circunda; en se empeño menciona los casos de Dolores Castro, Claribel Alegría, Dulce María Loynaz, la antes mentada Gioconda Belli, Luz Lescure, entre otras. Finaliza explicando que ejemplos como el de Mirada del Búho tienden a demostrar una solidaridad con las víctimas de la occidentalización y de la búsqueda de un capital cultural y simbólico acaso nunca descubierto dentro de los linderos de la civilización que ahora nos domina.

En un Suplemento Cultural de El Comercio de septiembre de 1987, Reyes dice que sus poemas tienen un origen de extrema espontaneidad, como un “fluir de emociones” que no tiene tiempo ni lugar previsibles; sean que rememore el viejo esplendor de Iquitos (Todavía quedan sembrados los fierros y las losas/ que surcaron el Atlántico/ y esas antiguas catedrales de crujientes puertas); sea que recree la trágica expedición al Yaquerana: (Es el sexto día desde los aviones/ (pájaros calientes que derraman cacerinas). Y es el día seis en los párpados helados/ por el miedo, la desolación y los ritos/ giratorios del viento)

Mirada del Búho (reeditada esta vez gracias al esfuerzo de la editorial Tierra Nueva) transita por la subjetividad y en aquella, plagada de surrealismo amazónico (si tuviera que hacer un paralelo, me atrevería a recordar a la nicaragüense Belli, su modelo y fetiche) se concentra lo más apreciable de la poesía de Reyes. Felizmente, no es poeta “amazónico” bajo los tópicos clásicos que se conocen, sino que, a partir de lo amazónico y cotidiano, tiende a representar a su tiempo y su contexto, lo cual efectivamente confirma la universalidad de su discurso poético. Su lirismo, como bien afirma Ana Varela, “rompe y desgarra las tristezas y sinsabores del pasado para superar la quietud y el abandono, la frustración y la pérdida más allá del recuerdo y sus tormentos”.

Todos los poetas tienen el corazón lleno de árboles, indica Reyes. Aquél mundo que el autor experimenta y expresa con cantos conmovedores donde la ternura puede trastocarse y volverse malicia o, aún más, euforia u odio. En otras palabras, la Amazonía y sus espejos (ríos dorados de escamas) son el pretexto perfecto para bosquejar con pulso firme y desbocado esta obra mayor de la literatura regional, que al fin y al cabo resulta tan sólo un pequeño tratado sobre nosotros y las miserias que nos asaltan, acaso, de cuando en vez.

Iquitos, marzo 2004.