Una pregunta quedó flotando en los Estados Unidos luego de la matanza de estudiantes ocurrida en el campus de Virginia Tech (agravada por el tiroteo mortal en el centro espacial de Houston): ¿Las películas desencadenan el desarrollo de los crímenes en masa o los magnicidios? Cho Seung-Hui,el joven estudiante surcoreano que desencadenó la muerte de 32 de su compañeros y la suya propia envió fotos y textos la NBC, uno de ellos en los cuales emularía una presunta escena de Oldboy, la espectacular cinta de su también compatriota Park Chan-Wook. Algunos medios incluso han llegado al punto de postular que dicha película habria generado trastornos graves en la frágil mente del asesino y lo hubiera ayudado a "planear" los asesinatos debido a sus escenas de violencia radical o por tratarse de una venganza (Esta es una segunda parte de una así llamada Trilogía de Venganza ideada por su autor)
Antolin Prieto en Cinencuentro se hace la pregunta ¿Puede una película ser el detonante de una violencia extrema?. Su razonamiento es que no. Según su teoría "revisando las fotos enviadas por Cho Seung-Hui a NBC, podemos relacionar sus posturas con otras cintas como Taxi Driver, Rambo, o El profesional. No se puede culpar a la ficción por la violencia de la realidad, poco tiene que ver lo que veamos en el cine, con lo que la falta de regulación y responsabilidad puede causar."
La más importante voz contraria a este desporpósito de juzgar al cine por las tropleías que se cometen en la realidad ha venido de parte del maestro Wes Craven, autor de películas indispensables de terror como The hills have eyes, Pesadilla en Elm Street o Scream. Craven ha señalado: "Si alguien tiene pensamientos violentos, se ve atraído por cosas violentas, pero, ¿son las cosas violentas las que llevan a pensamientos violentos? No lo creo. Para encontrar el origen de esta violencia hay que remontarse al inicio, mirar el pasado individual de la persona 'antes de sacar cualquier conclusión".
Además, señala los reportajes de la guerra en Irak transmiten mucha más violencia que cualquier película. "150 personas son asesinadas en un día. Son cuerpos verdaderos (...) No me sorprende que haya numerosas escenas de tortura en las películas de horror porque eso ocurre cada vez más y pasa en Irak o en las prisiones secretas de la CIA". La realidad, como se ve, es innegable, y esta termina deslizándose insidiosamente en las películas', estimó, finalmente.
Antolin Prieto en Cinencuentro se hace la pregunta ¿Puede una película ser el detonante de una violencia extrema?. Su razonamiento es que no. Según su teoría "revisando las fotos enviadas por Cho Seung-Hui a NBC, podemos relacionar sus posturas con otras cintas como Taxi Driver, Rambo, o El profesional. No se puede culpar a la ficción por la violencia de la realidad, poco tiene que ver lo que veamos en el cine, con lo que la falta de regulación y responsabilidad puede causar."
La más importante voz contraria a este desporpósito de juzgar al cine por las tropleías que se cometen en la realidad ha venido de parte del maestro Wes Craven, autor de películas indispensables de terror como The hills have eyes, Pesadilla en Elm Street o Scream. Craven ha señalado: "Si alguien tiene pensamientos violentos, se ve atraído por cosas violentas, pero, ¿son las cosas violentas las que llevan a pensamientos violentos? No lo creo. Para encontrar el origen de esta violencia hay que remontarse al inicio, mirar el pasado individual de la persona 'antes de sacar cualquier conclusión".
Además, señala los reportajes de la guerra en Irak transmiten mucha más violencia que cualquier película. "150 personas son asesinadas en un día. Son cuerpos verdaderos (...) No me sorprende que haya numerosas escenas de tortura en las películas de horror porque eso ocurre cada vez más y pasa en Irak o en las prisiones secretas de la CIA". La realidad, como se ve, es innegable, y esta termina deslizándose insidiosamente en las películas', estimó, finalmente.
1 comentario:
En realidad no soy seguidora del cine de terror, puede que por alli vea una del cine asíatico, pero trato de evitar mirar las de ése género, por que pienso que las imágenes de contenido extremo, marcan el subconciente, asi nos digamos por el lapso de las dos horas, que solo estamos viendo ficcion.
Creo también que, los creadores de las mismas, no estan bien en cuanto a su equilibrio mental, y dejemne decirles, que no los culpo.
Claro que la culpa no es del cine, eso solo lo pueden decir los que no saben ya que hablar, si bien puede que una imagen marque, no resulta suficiente desencademante para dar explicacion a semejantes locuras. Todo depende de cada uno, de las formas de hacer frente a cada problema, por más dificultosos y traumáticos que éstos sean.
Ahora, ¿es que alguien puede conservarse con salud mental, despues de ver atrocidad y media?, no hablo de las atrocidades de las películas, despues de todo los directores de éstas ven todos los dias lo mismo que vemos todos nosotros, hablo de el caos en el que estamos inmersos, de el caos del que participamos como receptores pasivos, de aquel que nos hace llegar a la repulsión por nuestros congeneres a cada vistazo al noticiero.
Y lo peor es que no podemos hacer nada, nada ante la pantomima que se despacha con escalofriante sinverguenceria Bush, nada contra lo que pasa en Irak, nada por prevenir estos sucesos que acontecen con mas frecuencia cada dia.
Solo mirar, no se puede hacer nada, ya ven, a Bush le importa un comino que su propia gente lo reprienda, él hace lo que le da la gana, mata a medio Irak y sigue sonriendo...¿acaso no es ésto peor que lo que ha hacho el surcoreano?. Sí, es más atroz, pero no hay quien le haga a dicho mandatario dejar de hacer lo que hace.
Entonces, no culpo que despues de percibir tantan cosas, a un esquizofrénico suelto se le terminen de aflojar los tornillos.
Saludos.
Y a respirar profundo.
Lourdes Vásquez.
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