18 junio 2006

EL EJEMPLO ECUATORIANO (ALEMANIA 2006)

Uno ve a la selección ecuatoriana en sus dos partidos disputados en el mundial de fútbol Alemania 2006 e inmediatamente se pone a comparar dicha participación, a todas luces extraordinaria, con la frustrante y deplorable campaña peruana en su intento por llegar desde hace 24 años a una competencia de tal magnitud.

En todo caso, hay que ser claros: nada de lo que hasta el momento ha logrado Ecuador (el cual aún no es demasiado, si nos ponemos a pensar en más grande) es producto del azar, de la suerte o de lo que se considera “milagro” – entelequia preferida por los ociosos y medrosos para explicar asuntos que deberían más bien contemplarse a la naturaleza de las cosas. Pero lo de nuestro vecino territorial es mucho más que eso. Este pase a segunda ronda, luego de vencer a Polonia y Costa Rica, es la consecuencia lógica de un proceso de trabajo y esfuerzo que ya tiene más de 15 años en marcha.

En 1990, luego de su eliminación al mundial de Italia, los ecuatorianos decidieron apostar a una secuencia de largo plazo que tenía como meta el campeonato de Estados Unidos, en 1994. El primero que inició la larga zaga fue el montenegrino Dussan Draskovic. El diario El Mercurio de Chile publicó hace una crónica donde se reconoce que Draskovic es reconocido como el hombre clave para el cambio de estatus del balompié del Guayas. "Cuando firmé mi primer contrato me regalaron un Fiat Uno azul. Y en ese auto empecé a recorrer el país, algo que nunca antes se había hecho".

Draskovic empezó a recorrer localidades sumidas en la extrema pobreza, donde los jóvenes jugaban en canchas de tierra. “Le decía a los entrenadores que me presentaran a sus 30 mejores jugadores. Yo a ellos los probaba durante ese período, y cuando encontraba a alguien con condiciones futbolísticas y mentales los dejaba en la lista. Así descubrí muchos jugadores, prácticamente a todos los que tuve en mi período en la selección (1988 a 1993)”.

Ecuador no estuvo en Estados Unidos 94, pero se logró la semilla sobre la cual se inició el trabajo del futuro. Después de Draskovic llegó Francisco “Pacho” Maturana, quien condujo al equipo en las eliminatorias rumbo a Francia 1998 y alcanzó el sexto lugar en la clasificación sudamericana, a cuatro puntos del cuarto clasificado, Chile. "Pacho" eligió a Quito como la sede de los partidos como local en las eliminatorias y estableció el sistema de juego 4-4-2, más acorde a la tradición ecuatoriana (su antecesor utilizaba el 3-5-2).

En el año 2000 llegó Hernán Darío "Bolillo" Gómez, otro colombiano. Su primera acción fue a dar a cada jugador un ejemplar del libro "Cien años de soledad", de Gabriel García Márquez. Fue un comienzo decisivo en el cambio. El "Bolillo" logró nuevos hitos. Ecuador logró el segundo lugar en la eliminatoria sudamericana y clasificó por primera vez en su historia a un mundial futbolístico. Retomó la escuela colombiana. Con su estilo locuaz, el “Bolillo” alcanzó un mayor grado de complicidad con los jugadores. Ahí estuvo la clave para la clasificación de Ecuador al Mundial 2002 de Japón-Corea, en el que quedó eliminado en primera fase, aunque ganó un partido a la siempre difícil Croacia.

"Bolillo" renunció tras una pésima Copa América en 2004, y Luis Fernando Suárez, ex ayudante de Maturana, tomó la posta. El nuevo entrenador hizo debutar a jugadores jóvenes. En los 18 partidos de la eliminatoria a Alemania, Ecuador consiguió 28 puntos y finalizó en tercer puesto, sólo detrás de Brasil y Argentina, a los que derrotó en Quito. Suárez ha dicho algo bastante audaz, pero que explica mucho de su mentalidad, claramente ascendente: "No le pido ayuda a Dios, sino que ofrezco más rigurosidad", asegura. "Quiero ser campeón del mundo, por lo que mi compromiso con Ecuador apenas comienza".Gracias a ese trabajo, la selección ecuatoriana ha adquirido una seguridad defensiva, una definición de primera y un dominio de balón peculiares.

En todo el proceso ecuatoriano, se pretende que el fútbol de clubes dé un salto cualitativo en cuanto se desarrolle el mercado de compraventa de jugadores. Los dirigentes también tienen una parte importante en este éxito, porque ellos fueron capaces de mantener un proceso. Le dieron importancia a las divisiones inferiores, al desarrollo de semilleros y descubrimiento de talentos, al estilo Draskovic. Han creado muchos procesos directos de infraestructura, clínicas de fútbol, capacitación e intercambio.

Por su parte, los jugadores cambiaron de actitud: ahora se han vuelto ganadores. Ecuador perfila una selección diferente, competitiva, compacta y con posibilidades de renovación. Y ahí aparecieron puntuales de Sudamérica como Alex Aguinaga, Iván Kaviedes, Carlos Vicente Tenorio, Edwin Villafuerte, Franklin Salas, Christian Lara y Luis Antonio Valencia, Iván Hurtado, Edison Méndez y Cristian Mora .

Obviamente, ante este panorama, la hinchada confía mucho en la selección. Y no es para menos: Ecuador, ya es capaz de derrotar a los grandes. Es un trabajo colectivo que ha generado sus frutos. Suárez pretende quedar en primer lugar de su grupo, neutralizando a la favorita y dueña de casa, Alemania. Y dado el juego que vienen realizando sus pupilos, no nos extrañaría que así fuera. Hasta sana envidia produce este éxito relativo. En los ecuatorianos sí aplica esa tan manoseada frase “Sí se puede”.

¿Y en el Perú? Seguimos creyendo en una generación de futbolistas fracasados. Contamos con dirigentes ineptos, corruptos y medrosos. No tenemos ninguna capacidad de organización. Seguimos creyendo que los triunfos aparecen de la noche a la mañana. Cambiamos entrenadores como quien cambia de calzoncillos. No trabajamos en divisiones inferiores. No trabajamos en planificación. Nos seguimos encomendando a Diosito cuando debiéramos ser más hombres para admitir nuestro error y enmendarlo. ¡Y hay algunos que creen que todo cambiará con un par de pulseritas y harta cerveza acumulada en la panza! Bah...

1 comentario:

Anónimo dijo...

ALGUNOS DATOS
1. Brasil gano la copa mundial en 1994, antes que eso, ganaron el mundial en 1970. Sumen 1970 + 1994 = 3964
2. Argentina ganó su última copa mundial en 1986, antes que eso ganaron el mundial en 1978. Sumen 1978 + 1986 = 3964
3. Alemania ganó su última copa mundial en 1990, antes que eso, ganaron el mundial en 1974. Sumen 1974 + 1990 = 3964
4. El mundial 2002 Brasil repitió el campeonato, y es lógico, ya que si sumamos 1962 (donde Brasil fue campeón) + 2002 = 3964, por lo tanto, Brasil debía ser el campeón, y así fue.
5. Y si se quiere pronosticar el campeón para Alemania 2006. Resten 3964 -2006 = 1958... Ese año el campeón mundial fue Brasil, así que se escuchan pronósticos para el 2006...
6. Y LO MÁS IMPACTANTE: Los fanáticos PERUANOS tenemos también motivo para alegrarnos, ya que seguramente ganaremos el mundial en el año 3964. Porque 0 + 3964 = 3964. O sea que ya sólo tenemos que esperar 489 mundiales para ser campeones! Eso equivale a 1958 años. En 1958 Brasil fue campeón del mundo. Así que la final va a ser contra los brasileños... ni se imaginan la goleada que les vamos a dar. ¡¡¡Pobres!...
FAVOR RETRANSMITIR PARA EMPEZAR A CELEBRAR!!!