17 julio 2008

CABALLERO DE LA NOCHE


Más allá de la que le dio su creador Bob Kane (ilustrador de las clásicas historietas), Batmán ha tenido muchas caras en su larga existencia. Yo, que las he visto casi todas, puedo señalar con plena seguridad que en The Dark Night se encuentra la más siniestra.Pero al mismo tiempo, detrás de ese maquillaje de maldad, se dejan ver los rostros más elocuentes, desaforados, intensos y honestos del hombre murciélago y sus antagonistas.

Estoy seguro que luego de ver El Caballero de la Noche, elespectador tendrá en su mente sensaciones y sentimientos encontrados. Yo, por ejemplo, quedé con un nudo en la garganta, del cual no me pude recuperar sino media hora después, caminando solo a través de frías y oscuras calles citadinas. Muy cansado, muy alucinado, muy vigilante. También melancólico y maravillado. Porque esta nueva entrega fílmica de la serie ha logrado pintar una de las más sofisticadas, reales y crueles pinceladas sobre lo peor de la condición humana. Y no hay duda que la historia (este no será para nada un post spoiler), los efectos especiales abrumadores, las maravillosas actuaciones (empezando por la del finado Heath Ledger, aterrador y macabro en su papel de Guasón y continuando con la aplomada y digna de Christian Bale como Batman).

Pero, más que todo la historia, carajo. Qué historia.

Si uno sigue la linea narrativa de las más de dos horas y media que dura el filme, en verdad va encontrando todas las referencias posibles al universo del comic, pero un microcosmos aun mas complejo, pesadillesco, casi como un descenso a los infiernos del cual debe aflorar la redención. Sin embargo, la redención se completa a partir del sacrificio, de la vocación estoica, de la enorme ambiguedad moral que precede a la templanza.

Batman es un ser extraño, un marginal, un tipo que Ciudad Gótica en el fondo no comprende y hasta teme, un animal humano que debe mantener su fe en sí mismo y al mismo tiempo su confianza en la bondad de una sociedad. Esa sociedad, que Guasón intenta sumir en el terror y la anarquía, es la que en momentos de terror necesita con urgencia apelar al protector vigilante. El Caballero de la Noche aparece, vence a los villanos y salva al mundo, aún a costa de no poder salvarse él mismo.

Pero el mundo hace tiempo ha perdido la fe.Y se permite el lujo de perseguir a sus propios guardianes entre el centeno. Batman y Harvey Dent el fiscal héroe que después experimenta una mutación física y psicológica atroz, son dos caras de una misma moneda. Solo que la de Bruce Wayne/Batman, alejado, misógino, esquizofrénico en su concepción del deber se encuentra en las antípodas de lo que termina convirtiéndose el hombre en quien había depositado toda su confianza con el fin de hacerle cambiar de vida. Lo único que quedan son las sombras, la oscuridad, la noche sobre la cual caminar con armadura de guerrero y defensor de la justicia.

Que me perdonen los puristas y los amantes de Tim Burton, pero, con justicia, esta película del gran Christopher Nolan es la mejor de toda la saga. Y posiblemente uno de los mejores filmes del 2008. Pero al mismo tiempo es más conmovedora y dark que mil lecciones del género.

No es poco decir.

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