CORTITAS DE LA SEMANA.

1.- Es risible que los maestros del Perú protesten por cosas que en realidad deberían aprobar y felicitar. Una Ley de Carrera Magisterial que les da alternativas para que ellos mismos realicen sus propias conquistas, les brinda mecanismos de ascenso profesional basados únicamente en sus méritos propios, que permite – y obliga a – la especialización y el perfeccionamiento, que sanciona la holgazanería y las politiquerías baratas tendría que ser apoyada plenamente por toda persona de buena voluntad. Pero cuando los radicalismos y la mediocridad se camuflan en marchas que esconden otro propósito, al final quienes pierden son los escolares, y el propio país. Tenemos la peor educación del mundo y seguimos en estas actitudes. Penoso.

2.- Algunos datos que se han presentado en un coloquio de la Club de la Banca y Comercio, corroborados por el MEF, el BCR y el Instituto Peruano de Economía, nos dan cifras sobre el impacto negativo y mercantilista de las exoneraciones tributario en Loreto: en el primer trimestre de este año, el empleo en Iquitos sólo creció 0,3% en empresas de 10 y más trabajadores, mientras que en ciudades donde se si pagan impuestos se hizo alrededor de 15% a 20%; en el 2006, el valor bruto de la producción de bienes en Loreto cayó 0,4% respecto al año anterior, cuando la economía nacional creció ese año 8%; además, el año 2005 las 10 empresas más grandes de Loreto se llevaron el 92% de los beneficios del reintegro tributario que se otorgó; En el 2006, mientras que el Lima la compra promedio diario por auto de gasolina fue de 0,7 galones, en Loreto fue de 8,6 galones (¿tanto gastamos en movilizarnos?).

3.- Al fin se acabó la prohibición de los vuelos diurnos de y hacia Iquitos, luego de la terrible negligencia que cometió la gestión edil anterior, quien en una actitud medrosa francamente inexplicable permitió que se llegara al extremo de cerrar un aeropuerto internacional debido a los gallinazos. Ahora, siendo evidente que hay un beneficio político para el alcalde Salomón Abensur, también es cierto que este se está lanzando al otro extremo, pues su calculada euforia (aquella “caravana” improvisada resultó tan evidente en su manipulación ), lo que aún deja pensando en los problemas que se tiene con el nuevo relleno sanitario, ubicado al lado de la reserva Allpahuayo-Mishana (que no es un problema político, sino un caso donde se ha procedido irregularmente en lo sanitario, lo ambiental, lo legal y, claro, está los procedimientos). Ni hablar de las últimas declaraciones-acusaciones del teniente alcalde Joe Padilla en la tele, hace unos días, señalando que el botadero era “un negocio” del Alcalde (¿?). Si bien creemos que hay una buena disposición para mejorar lo que se dejó anteriormente (y una buena noticia para la ciudad), ahora debemos alentar a que el Alcalde respete también las formas, los procedimientos, las leyes y, cómo no, la razón.

4.- Lamentable desenlace el ocurrido en la Feria del Libro, uno de los pocos espacios de luz - amén de la Semana del Libro de Tierra Nueva o el ciclo de presentaciones de la UPI -en los cuales se puede tener una oferta académica y de conocimiento propios, censurada abiertamente - desconocido su espacio principal y tradicional – por el Alcalde de Maynas y ciertos “iluminados” funcionarios (alguno de ellos de parentesco directo con un talentoso joven pintor que anteriormente ha expuesto en la misma Feria). Debemos recordar que cuanto menos actividad cultural exista en una ciudad, menos ciudadanos fuertes e informados tendremos. Luego de la lamentable defección del principal organizador (vaya uno a saber por desconocimiento o mala intención), la responsabilidad está en los alcaldes distritales o el presidente regional, suficientes para demostrar a Abensur el tremendo error que estriba en cerrarle espacios al saber amazónico por puro capricho autoritario (los pretextos que se quieran generar al respecto son intrascendentes, porque esconden el verdadero motivo de una inaceptable agresión al libro como espíritu y motivación primigenia de la humanidad).



Fotos: Pro & Contra; Kanatari